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“Vidal de la Peña se ofreció para ser el candidato de Ciudadanos a la Alcaldía de Santander”

Félix Álvarez, candidato de Ciudadanos a la Presidencia de Cantabria. |

Rubén Vivar

Félix Álvarez (Santander, 1966) formará con toda seguridad parte del próximo Parlamento de Cantabria y quien sabe si del Gobierno autonómico. Albert Rivera le ha confiado la tarea de encabezar la lista de Ciudadanos en su comunidad natal y aunque las encuestas apuntan que será complicado tocar poder, no se resigna a resaltar que están “preparados para gobernar”. Dice que uno de sus grandes valores respecto al resto de candidatos es que ha llegado a la política “con 50 años y con las manos libres” y después de haber sido profesor informático, empresario, autónomo y, por supuesto, actor, su faceta más conocida y a la que se ha dedicado durante las dos últimas décadas. Por eso, es inevitable que reconozca que le encantaría ser el próximo responsable de la Consejería de Cultura. 

“A mí no me preocupa saber qué será de mí dentro de cuatro años -en las próximas elecciones-, siempre me he sabido ganar la vida. Lo que preocupa es saber qué va a ser de Cantabria dentro de 15 o 20 años”, afirma tajante durante la entrevista concedida a eldiario.es, en la que asegura que el fichaje estrella de la candidatura del PP que lidera María José Sáenz de Buruaga, el empresario Lorenzo Vidal de la Peña, se ofreció antes a Ciudadanos para ser el candidato a la Alcaldía de Santander. 

Hemos llegado al ecuador de la campaña. ¿Qué balance hace de esta primera semana? ¿Qué sensaciones tiene?

Ha sido una semana muy intensa, muy excitante y muy divertida. Las sensaciones que tengo son realmente buenas. Ha habido un cambio con respecto a lo que viví hace tres años en la anterior campaña electoral. Antes la gente nos podía votar o no, pero no notábamos nada, no notaba ese feeling. Sin embargo, ahora sí que hay mucha gente que se dirige a mí y que dice con orgullo que ha votado el 28 de abril a Ciudadanos y que nos va a volver a votar.  

El pasado miércoles estuvo en Santander Inés Arrimadas y decía: “Ahora nos toca gobernar”. ¿Sería una decepción quedarse otra legislatura en la oposición?

No, no, no. En absoluto. Al final nosotros estaremos donde los cántabros nos coloquen, pero yo creo que estamos preparados para gobernar. Yo, personalmente, he hecho un curso intensivo en el Congreso de los Diputados durante tres años siendo portavoz de Cultura, en una Comisión que además que ha tenido muchísimo éxito. Dicho esto, si no entramos en el Gobierno, haremos una oposición leal, honrada, dura, exigente, pero siempre buscando el mejor servicio para todos los cántabros.

En caso de que Ciudadanos formara parte del próximo Gobierno de Cantabria, ¿qué áreas le gustaría gestionar a Félix Álvarez? ¿Dónde estaría más cómodo?

La verdad es que no me lo he planteado. Estamos centrados en lograr los votos suficientes para tener la posibilidad de estar en el Gobierno y salimos con ánimo de ganar. En cualquier caso, es una negociación que habría que llevar con posterioridad al 26 de mayo. De modo egoísta te diría que a mí me gustaría gestionar el área de Cultura. Pero bueno, ya digo que eso sería una negociación posterior a las elecciones.

¿En qué cambiaría un Gobierno de Cantabria con la presencia de Ciudadanos con respecto a lo que hemos visto hasta ahora?

Básicamente en una cosa fundamental, y es que no tenemos mochilas con piedras que nos pesen, que nos impidan ir caminando ligeros hacia nuestros objetivos. No tenemos ninguna red clientelar que alimentar, con lo cual tendríamos las manos libres para tomar las decisiones que hay que tomar y que los viejos partidos no pueden llevar a cabo porque se deben a esos amiguetes, a esos enchufados y a sus redes clientelares que tienen que mantener.

Usted dio el salto a la política hace relativamente poco. Hace tres años que entró en el Congreso de los Diputados y previamente había dedicado su vida a la actuación, principalmente como cómico. ¿Cree que esa faceta le puede penalizar a la hora de que los electores le vean como candidato a la Presidencia de Cantabria?

En absoluto. Yo creo que los cántabros tienen la suficiente madurez personal, política y democrática para no confundir lo que son trabajos profesionales con mi actual dedicación política. De hecho, es verdad que me he dedicado a ser cómico, pero yo no nací ni calvo ni en la televisión. He sido profesor de Informática, he sido empresario, soy autónomo y he creado más de 30 puestos de trabajo a lo largo de mi trayectoria. En absoluto creo que eso me vaya a penalizar. De hecho, las valoraciones que han salido en las últimas encuestas se han disparado con respecto a las que tenía hace tres años.

¿Entonces cree que la gente le percibe ya más como un político que como humorista?

Creo que la gente ha percibido el trabajo que he hecho en el Congreso. He sido el más activo de los cinco diputados cántabros que había, el que más iniciativas presentó, el que más veces subió a la tribuna de oradores en pleno... El trabajo de la Comisión de Cultura está ahí y en muchos aspectos hemos estado liderando esta Comisión, hasta el punto que como anécdota diré que en los últimos Premios del Sindicato de Actores y Actrices a la Comisión de Cultura le dieron un premio. Actores y actrices dando premios a políticos, esto es una señal de que el mundo se va al carajo.

Creo que la percepción que tiene la gente de mí es de una persona que puede dedicarse a la política. Es más, yo siempre he sido tremendamente serio en toda mi trayectoria profesional. No hay que confundir la seriedad con ser divertido. Uno puede ser tremendamente serio y a la vez tener un sentido del humor más agudizado.

Usted ha dado el salto a la política autonómica después de estar en el Congreso. Normalmente suele ser al revés. En la mayoría de los casos se empieza por la política municipal o regional y luego se da el salto a Madrid. Se ha especulado mucho con que Albert Rivera le había empujado a ser el número uno aquí en Cantabria. ¿Es así?

Bueno, no es que me hayan empujado, pero sí es verdad que en un partido político se forman estrategias. Toni Cantó ha ido a Valencia, Paco Egea se ha ido a Castilla y León, y eran dos diputados además muy reconocibles. A mí me plantearon la posibilidad, pero nadie me ha obligado a ir a ningún lado. Dicho esto y teniendo mucha nostalgia del trabajo parlamentario en el Congreso, yo no concibo mayor orgullo y mayor honor que ser el candidato a la Presidencia de mi tierra.

El empleo sigue siendo la principal preocupación de los cántabros. ¿Qué medidas plantea Ciudadanos para poder generar empleo en Cantabria y además mejorar la calidad del mismo?

En primer lugar cuando oigo a algún político decir que va a crear no sé cuantos miles de puestos de trabajo yo me echo a temblar. Los políticos no creamos puestos de trabajo, los crean los autónomos, los emprendedores, las pymes, las empresas... Ellos son los que generan riqueza, los que generan empleo y los que pagan impuestos que mantienen el Estado del Bienestar. Es verdad que tenemos más del 90 por ciento del empleo precario y es verdad que el paro no disminuye al ritmo que nos quieren vender. Lo que disminuye es la población activa. Tenemos 20.000 personas menos de población activa en los últimos cinco años, gente que se va, como mi propia hija, que tiene 32 años y que es profesora en una Universidad de Chile siendo doctora en neurociencia. Esa es la realidad, eso es lo que perciben los cántabros.

En el último mes ha bajado el paro y bajó de manera considerable, pero más del 82 por ciento eran contratos temporales en el sector servicios. Esto no es sostenible. Lo que hay que hacer es cambiar el modelo productivo, tenemos que facilitar el trabajo a los autónomos. Me decía el otro día uno que se conformaba con que le quitaran los palos de las ruedas y la verdad es que es un gran avance que los políticos no molesten.

Nosotros vamos a extender la tarifa plana para los autónomos y vamos a hacer una cosa revolucionaria: que no adelanten el IVA de las facturas que todavía no han cobrado, que es tan de sentido común que cuando uno lo dice se siente hasta mal, pero nadie lo ha hecho. También vamos a hacer que los autónomos no paguen la cuota de la Seguridad Social si no tienen ingresos reales, que no lleguen al Salario Mínimo Interprofesional.

Y luego llevamos años pidiendo el contrato único. Ahora Podemos también lo está pidiendo. Otra iniciativa: la mochila austriaca, una mochila donde los trabajadores van guardando parte de dinero de las cotizaciones para que luego ellos se lo puedan llevar o lo puedan sumar a su jubilación. Nos llamaban “liberales sin corazón” y ahora también lo está proponiendo el Partido Socialista. Y también el complemento salarial para los trabajadores que no llegan a final de mes. Son medidas que modificarían algo el mercado laboral y lo mejorarían sustancialmente.

En las últimas elecciones autonómicas y municipales celebradas en 2015 Ciudadanos obtuvo dos diputados en el Parlamento de Cantabria y dos concejales en el Ayuntamiento de Santander. Tres de esos cuatro representantes acabaron siendo tránsfugas y además influyendo de manera importante en la política. ¿Han tomado medidas para evitar que esto vuelva a suceder con los cargos que salgan elegidos tras estas elecciones?

No me importa volver a pedir perdón ni a pedir disculpas por aquello que ocurrió. Todos los partidos políticos en su historia han tenido casos de transfuguismo y nosotros también. Fue un caso de sarampión que tuvimos que pasar como adolescentes. Ahora somos un partido político maduro. Es verdad que tener tránsfugas es una auténtica desgracia, pero también es una auténtica vergüenza que haya partidos políticos que utilicen esos tránsfugas para tener mayorías que no les corresponden, como ocurrió en el Ayuntamiento de Santander, donde la señora Gema igual ha tenido cuatro años de gobierno municipal apoyado en dos tránsfugas. También en el Gobierno regional han aprobado unos presupuestos con un tránsfuga. Hemos aprendido la lección, hemos tomado nuestras medidas, nuestro proceso de selección ha sido muchísimo más exigente y ahora estamos convencidos de que eso no va a volver a ocurrir.

Todo parece indicar que en Santander el Partido Popular va a perder apoyo, como las encuestas también prevén a nivel regional. En caso de que Ciudadanos fuese decisivo para decantar la balanza, ¿usted apostaría por apoyar la continuidad de Gema Igual al frente del Ayuntamiento o por favorecer un cambio en la ciudad?

Yo creo que un cambio y que abrir las ventanas y que entre aire fresco sería deseable. Nos ha pasado en Andalucía, donde hemos encontrado 25.000 trabajadores fantasmas, 500 millones de euros al año tirados en trabajadores que no existen. Pero el 27 de mayo hablamos. Vamos a ver cuáles son las aritméticas parlamentarias que puedan resultar de las elecciones y veremos qué se puede hacer.

Usted dijo hace dos semanas, el 30 de abril, en el foro de la Cadena SER que no era partidario de aplicar un cordón sanitario a ningún partido y que de salida no cerraba la puerta a alcanzar un acuerdo con ninguna formación. Y esta semana le hemos escuchado decir que no se ve pactando con Vox. ¿Por qué ese cambio de criterio?

Yo siempre he dicho lo mismo. Dije que no voy a poner cordón sanitario a nadie, pero siempre dije que había partidos políticos con los que me iba a costar mucho más llegar a acuerdos que con otros. Con Vox, seguramente, no voy a poder porque ellos quieren reformar la Constitución para deshacer el Estado autonómico y yo defiendo la Constitución y el Estado autonómico. Pero tampoco con Podemos, que quiere un Estado plurinacional. Esto también al señor Pedro Sánchez depende del día que tenga le parece bien. También me costaría llegar a pactos con el PSOE, que nos llama “perros” porque vamos a Alsasua a defender a la Guardia Civil o “fachas” porque llevamos la bandera de España y porque defendemos la unidad de todos los españoles.

Con Revilla ya bien.

Bueno, yo no he venido aquí a cobrar facturas pasadas ni a poner mis fobias o mis filias personales por delante de un proyecto político y mucho menos por delante del interés de todos los cántabros. Fueron otras etapas, fueron otros años. Es verdad que la relación con el señor Revilla es ahora respetuosa, agradable, distendida, cosa que yo personalmente agradezco porque son cosas que pasaron hace muchos años. Aquello no tiene nada que ver con la trayectoria política que tengamos aquí y ahora.

¿Es cierto que Lorenzo Vidal de la Peña se ofreció a Ciudadanos para ir en sus listas?

Sí. Fue a principios de enero, justo después de Reyes. Se nos ofreció para liderar la candidatura de Ciudadanos al Ayuntamiento de Santander. Nosotros ya teníamos claro que el candidato ideal era Javier Ceruti y quedamos en valorar otras opciones.

Y dos meses después, en marzo, anunció su fichaje por el PP. ¿Qué pasó?

Bueno, eso que lo diga el señor Vidal de la Peña. Habría que preguntárselo a él.

¿Eso qué quiere decir?

Es una pregunta que debería responder él. Yo paso palabra.

Si fuera elegido presidente de Cantabria, ¿cuáles serían las tres primeras medidas que tomaría?

La primera, hacer una auditoría de cómo se encuentra el entramado público. Nosotros tenemos casi la convicción de que se pierden decenas de millones de euros. Necesitamos hacer esos estudios, ver qué empresas públicas están realizando el objetivo para los que fueron creadas y aquellas que sí lo están haciendo, ver cómo están gestionadas, y otras creemos que están duplicadas y las fusionaríamos. Un ejemplo de cual quitar: la Fundación Comillas, seis millones de euros para que se gradúen al año cinco o seis alumnos. En las orlas, cuando acaban los cursos, hay más profesores que alumnos. Es muchísimo dinero para una región como Cantabria. Sodercan y el ICAF, una se dedica a los proyectos empresariales y otra a financiar esos proyectos empresariales. No entendemos por qué tienen que estar separadas.

En Andalucía hemos cerrado más de cien chiringuitos entre consorcios, observatorios, empresas públicas... Nos hemos encontrado 25.000 trabajadores fantasma que están cobrando todos los meses y no trabajaban; nos hemos encontrado 500.000 personas fuera de las listas de espera en medicina; 75.000 personas fuera de las listas de Dependencia. Tenemos que hacer un estudio real, para mí eso sería fundamental, y una vez que quitas esa grasa, una vez que tienes esos recursos disponibles, tendríamos seguramente que invertirlos en Educación, en Sanidad, en Dependencia y en inversión productiva.

¿Qué puede aportar Félix Álvarez a la política de Cantabria? ¿Por qué los cántabros deberían depositar el 26 de mayo la papeleta que usted encabeza?

Porque sé de qué va esto, de qué va la vida. He tenido infinidad de trabajos y responsabilidades, he tenido la suerte y la fortuna de tener éxito y de fracasar, y sé lo que son los halagos y los bofetones, y sé lo que es crear puestos de trabajo y sé lo que es levantar una persiana todos los meses y pagar seguros sociales y pagar nóminas, y porque siempre he sido un enamorado de la política y de la historia de mi país, y porque he llegado a la política con 50 años y tengo las manos sueltas, limpias, libres y no tengo mochilas, de modo que podré tomar las medidas que otros no toman porque no pueden.

Decía [Jean-Claude] Juncker que todos sabemos qué reformas hay que hacer, pero que nadie las hace porque dentro de cuatro años no les votarían. A mí no me interesa nada saber qué va a ser de mí dentro de cuatro años, no tengo ni una preocupación por eso, me he ganado la vida durante muchos años. Me interesa lo que va a ser de Cantabria dentro de 10, 15 o 20 años. Eso es lo que me interesa.

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