Los expertos de EH Bildu y PP cargan contra la propuesta de reforma del Estatuto vasco acordada por los de PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos
A las doce del mediodía, los cinco expertos comisionados por los partidos con representación en el Parlamento Vasco y el letrado mayor han dado comienzo a la última reunión de los trabajos iniciados en otoño del pasado año para redactar un borrador de reforma del Estatuto de 1979. A la cita se llega con las cartas sobre la mesa porque, según ha trascendido, el texto que se alumbrará viene avalado por los expertos propuestos por PNV, PSE-EE y Elkarrekin Podemos y el rechazo, por motivos opuestos, de los de EH Bildu y el PP. Tan es así que los tres primeros se han sentado frente a los segundos en la mesa de la pequeña sala de ponencias de la tercera planta de la Cámara que ha acogido, como tantas veces en los últimos meses, este foro de trabajo.
Éstos, Mikel Legarda (PNV), Alberto López Basaguren (PSE-EE) y Arantxa Elizondo (Elkarrekin Podemos), han llegado a la Cámara juntos igualmente y han preferido no hacer demasiados comentarios sobre el desarrollo de los trabajos y mucho menos sobre el producto final que entregarán este lunes al Parlamento. “Hemos trabajado de una manera honesta. Más allá de las divergencias, es un avance hacia un nuevo pacto de autogobierno”, ha comentado a los periodistas Legarda, que es también diputado nacionalista. “No voy a hacer hoy ningún tipo de comentario sobre el contenido”, ha dicho, por su parte, Elizondo, un mensaje similar al de López Basaguren.
Ante la expectación de medios de comunicación en el Parlamento, mucho más se han explayado Jaime Igancio del Burgo (PP) e Íñigo Urrutia (EH Bildu). “Esto de gracia tiene poco porque creo que el País Vasco va por una senda equivocada”, ha sentenciado Del Burgo, que considera que esta reforma será “la historia de un imposible” y algo “condenado al fracaso” porque al desbordar la Constitución no tendrá recorrido alguno aunque “a lo mejor en estos momentos con un Pedro Sánchez que pueda necesitar ciertas muletas para poder ser investido tienen más posibilidades que las del 'plan Ibarretxe'”. Del Burgo ha asegurado que era posible una “actualización” del Estatuto de 1979 y ha defendido hacerlo para dar más poder a los territorios forales, Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, por ser éstos verdaderamente los titulares de los “derechos históricos” que la Constitución reconoce al País Vasco.
Urrutia, por su parte, ha afeado que el texto propuesto por los expertos se queda corta y se aleja de las bases soberanistas que pactaron PNV y EH Bildu y que, singularmente, minimice el derecho a decidir. “El mandato que teníamos se ha desviado, está a la vista. Estábamos para dar forma jurídica a un mandato político y eso no se ha cumplido. No se nos pedía que sustituyéramos al Parlamento”, ha indicado Urrutia, que ha calificado de “frustrante” el proceso y que presentará un texto articulado que refleje las bases soberanistas y que plantee un “salto cualitativo” que Euskadi pase de una “comunidad autónoma” a un modelo confederal y más próximo a un Estado.
El texto y los votos particulares quedarán en manos de la Mesa de la Cámara este martes y está previsto que el 11 de diciembre se reúna la ponencia de autogobierno para fijar el calendario de la posible reforma, aunque siempre con el hándicap de que no queda tiempo material en la legislatura vasca para completarla. Cualquier texto tiene que pasar por las Cortes Generales antes de ser sometido a referéndum.