El exconsejero Antonio Fernández califica el fraude de formación de “bluf” provocado por “los nervios de los interventores”
Los primeros exconsejeros se han sentado este martes en la comisión de investigación sobre el supuesto fraude con subvenciones de formación para el empleo desde 2002 hasta hoy creada en el Parlamento de Andalucía: José Antonio Viera (en el cargo entre 2000 y 2004) y Antonio Fernández (2004-2010), los dos investigados también por el caso ERE y que han coincidido en negar que dieran o recibieran cualquier orden para saltarse los controles con estos fondos públicos e incluso han cuestionado el trabajo de este órgano.
Lo ha hecho especialmente Antonio Fernández, quien ha comenzado su intervención criticando los criterios con los que se está desarrollando la comisión de investigación y su propia citación que conoció por la prensa, y pidiendo a los diputados que estén “a la altura”, les ha echado en cara que se haya insinuado por parte de algunos, con sus preguntas, que se ordenó flexibilizar los controles: “Es patético y ridículo porque significa una impresentable desconfianza de quien lo dice hacia los funcionarios y un desconocimiento absoluto de la administración”.
Su desprecio iba claramente dirigido a los pupulares como cuando más tarde se negó a responderles porque rechazaba cualquier “interlocución con gente tan falsa como la del PP”, un partido que no le merece “ningún respeto”, menos después de que Javier Arenas tuviera “la poca vergüenza” de decirle que no se preocupara y, después, “pedir” su ingreso en la cárcel.
Pero también, preguntado por la diputada de C's Marta Bosquet, se ha negado a hacer autocrítica: “Cuestiono la mayor, lo único acreditado a día de hoy es que teóricamente se han perdido 52.000 euros [en alusión a las prescripciones que confirma la Junta de Andalucía, que son algo más de 58.000 euros]. Yo parto del principio de que esto es un bluf generado por el nerviosismo que surge en 2011 o 2012 y que hace que se cuestione todo el sistema”.
En su opinión, “a los interventores les entran esos nervios por la presión social y mediática” y se genera “una crisis de ansiedad donde todo lo que había sido normal deja de serlo”. Para continuar: “No puedo hacer autocrítica y se verá cuando terminen los procesos judiciales (...). Lamentablemente esta comunidad autónoma ha entrado en una alteración de los biorritmos normales y todo es ilegal. (...). No hago autocrítica. Lo que hace falta es una autocrítica colectiva”.
El diputado de Podemos Juan Moreno Yagüe le ha preguntado entonces que por qué si es un bluf esto llevo a que en 2011 fuera la última convocatoria de subvenciones. “No creo que fuera porque no habría nada, porque entonces sería una irresponsabilidad”, le ha espetado, a lo que Antonio Fernández ha respondido que él hubiera hecho “lo mismo” si hubiera seguido como consejero porque había un “atasco de gestión”. De hecho, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, no tiene previsto desbloquear estos fondos públicos hasta este mes, cuando están previstas tres órdenes con subvenciones.
Por otro lado, en respuesta a Elena Cortés (IU), ha expresado que nunca habló de formación con el entonces presidente de la Junta de Andalucía Manuel Chaves. “Que yo recuerde, ninguna (...). No tenga en sus alforjas la posibilidad de implicar a los presidentes”, le ha aconsejado a la parlamentaria.
Finalmente, el exconsejero se ha referido también a que lleva apartado de la política seis años y que este caso ha supuesto que le hayan estampado un “sello” que lo ha dejado fuera para siempre. “De la vieja y de la nueva política”. Lo ha lamentado “profundamente” por todo el “daño” que cree haber sufrido: “No me dejan los partidos acercarme a la política cuando ha sido mi actividad desde los 14 añitos”.
Previamente había comparecido José Antonio Viera, en un turno que se ha desarrollado de manera más tranquila. El exconsejero ha defendido su “honestidad” y la de su equipo durante el tiempo que fue responsable de este departamento y ha subrayado que “nunca” dio instrucciones para que se diera “trato de favor” a ninguna persona o empresa ni tuvo conocimiento de que otros lo hicieran, contestando específicamente que ocurrió de esta manera también con los consistorios gobernados por socialistas.
Pese a que ha reconocido errores (...) lógicos en una dilatada actividad en la gestión de 18 centros directivos“ ha insistido en el ”buen trabajo“ de su equipo: ”El tiempo y la justicia pondrán en valor las manifestaciones que hoy realizo“. En este sentido, ha incidido también que nunca fue advertido por informes de la Cámara de Cuentas de Andalucía de ”irregularidades, ni leves ni graves“, pese a que, mirado con perspectiva después de haber pasado 12 años desde que dejó el cargo, ve cuestiones que ”pueden ser revisables“ para haber mejorado los procedimientos para conceder estos fondos públicos.
En este caso, sí ha contestado a Jaime Raynaud (PP-A), quien entre otras cosas le ha preguntado si firmó resoluciones de subvenciones para sedes compartidas entre el sindicato UGT-A y el PSOE: “Tajantemente, no”. Igual que también ha negado que firmara resoluciones de exoneración.
También ha planeado sobre la sesión el plantón del lunes de la ministra Fátima Báñez, que ha sido echado en cara a los populares. Varias veces ha tenido que intervenir el presidente de la comisión de investigación, Julio Díaz, para imponer orden, pero no por ello se ha librado tampoco él del enfado del PP-A, cuya diputada Teresa Ruiz Sillero le ha afeado nuevamente su labor. “Este presidente está cansado y harto. Le estoy dejando pasar demasiado, son ustedes los que están empujando los límites”, ha concluido Julio Díaz.
