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Declaración por decreto

Emilia Pérez Morales

Desde el punto de vista de aquellos que trabajamos en el sector turístico de la Isla, el hecho de que el presidente del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, haya aprobado mediante decreto la declaración básica de impacto ecológico del futuro Centro de Visitantes de El Roque de Los Muchachos, nos pone en el camino de alcanzar una meta largamente anhelada. El centro será protagonista de un entorno de singular y tranquila belleza, en una Isla que empieza a acostumbrarse a mirar al cielo como un valor añadido, regalo de la propia naturaleza. El turismo sustentable se expresa a través de actividades turísticas, que varían en función de los atractivos y potencialidades de cada sitio. En el caso de La Palma, El Roque de los Muchachos y los observatorios allí instalados conforman un enclave emblemático, que lamentablemente no cuenta con una infraestructura, necesaria a todas luces, que nos permita conciliar la grandiosidad del entorno con la curiosidad de cuantas personas lo visitan. Desarrollar, en las actuales circunstancias una actividad divulgativa sobre la labor investigadora de los diferentes observatorios, es complicado y, en ocasiones, embarazoso, al no ofrecer las prestaciones mínimas que demandan los turistas. Se trata, por tanto, de una instalación fundamental y de un verdadero estímulo para el sector.

No descubrimos nada si añadimos que estamos faltos de buenas noticias en momentos de crisis. La experiencia de los últimos años nos muestra a La Palma aislada, excluida de los centros de poder acaparados por Tenerife y Gran Canaria y, en esa situación, como cualquier isla de las llamadas “menores” o “periféricas”, se ha vuelto frágil, endeble y vulnerable. Ya va siendo hora de que encontremos las claves para afrontar retos sin complejos, para mirar cara a cara a los problemas y saber encauzarlos hacia el mejor de los destinos. Por eso, esperamos que nuestros políticos, de una vez por todas, remen en una misma dirección, con proyectos comunes, al margen de partidos y banderías políticas. El Centro de Visitantes de El Roque de los Muchachos, sin ser la única, puede ser una de las llaves del desarrollo turístico para esa Isla sostenible, limpia y eficiente, que todos queremos.

Espero y deseo no equivocarme. Y que esa declaración, que cuenta con informes favorables de la unidad de Patrimonio del Cabildo de La Palma, el Consejo Insular de Agua, y de los servicios técnicos y jurídicos del Cabildo, abra –como ha dicho el presidente, Anselmo Pestana, “la vía para aprobar el proyecto, someterlo a información pública y poderlo licitar antes de que finalice del año”. No obstante, como sabemos que las recetas en estos tiempos pasan siempre por recortes y rebajas, sería bueno recordar a nuestros dirigentes, que tan fundamental es elevar el número de turistas que visitan la Isla, como el grado de satisfacción que puedan llevarse tras la estancia en ella. El Centro de Visitantes de El Roque de los Muchachos, tal y como está concebido, será el contrapunto a un lugar único, que contribuirá al objetivo de obtener la mejor consideración por parte de nuestros clientes. Este es un momento para que los gobernantes olviden diferencias y, todos a una, huyendo de esos discursos que, para mal nuestro, se esconden bajo el manto ideológico, cerrar filas ante un proyecto anhelado por todos. Lo contrario sería un error, un inmenso e injustificado error.

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