La jueza envía a prisión a Eduardo Zaplana, un testaferro y su asesor fiscal
La jueza que investiga la operación Erial envía a prisión sin fianza al exministro Eduardo Zaplana. Concretamente, ha ingresado en Picassent, una cárcel construida en 1990 y dispone de 239 celdas. La Fiscalía Anticorrupción ha solicitado este jueves el ingreso en prisión incondicional comunicada y sin fianza del expresidente de la Generalitat Valenciana. Por el caso Erial están detenidas siete personas, acusadas de cohecho, blanqueo de capitales, malversación y prevaricación.
La jueza también ha decretado cárcel para Joaquín Barceló, considerado su testaferro y quien tiene una decena de inmobiliarias y constructoras a su nombre, y Joaquín Grau, su asesor fiscal. Los otros cuatro detenidos han sido puestos en libertad con obligación de comparecer semanalmente en el juzgado y retirada de pasaporte.
Zaplana ha pasado este jueves a disposición del juzgado de instrucción número 8 de Valencia imputado por blanqueo y delito fiscal y ha negado todas las acusaciones. Al exministro se le investiga por presuntamente blanquear más de 10 millones de euros que tenía ocultos en paraísos fiscales. La compra de un piso en Chamberí de 1'8 millones de euros precipitó la operación de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil.
José Cotino, sobrino del exconseller Juan Cotino, también ha pasado a disposición judicial y se ha acogido a su derecho a no declarar ante la jueza. La titular ha decretado libertad sin fianza para el empresario, con la obligación de comparecer una vez por semana en el juzgado. Lo mismo ha sucedido con Vicente Cotino, el también sobrino del exconseller y expresidente de las Corts, Juan Cotino, para quien la magistrada ha decretado libertad con medidas cautelares.
Juan Cotino, Rosa Barceló y Mitsuko Hernándiz, los tres imputados, tendrán que acudir a declarar como imputados al juzgado, el primero después de haber acudido a ser interrogado por la Guardia Civil este jueves.
Sobre la una de este viernes, un furgón de la Guardia Civil ha trasladado a Eduardo Zaplana y sus presuntos compinches a la prisión de Picassent, donde ya cumple condena por corrupción el que fuera su conseller Rafael Blasco desde 2015.
En medio del pequeño tumulto, Cotino se ha limitado a decir en valenciano a los periodistas que le pedían declaraciones: “Id con cuidado que os vais a caer”. Se ha acogido a su derecho a no declarar ante la Guardia Civil puesto que prefiere guardar silencio hasta que no conocer el sumario, actualmente declarado secreto.
Ha llegado acompañado de su abogado, Juan Carlos Navarro, que es el mismo que defiende a Francisco Correa en las diferentes causas judiciales del caso Gürtel en las que está procesado.
Poco después, en otro coche, ha llegado al cuartel de la Guardia Civil de Patraix Francisco Grau, abogado y asesor fiscal, otro de los detenidos en el caso Erial.
Detenido el pasado martes
El exministro de Trabajo Eduardo Zaplana fue detenido este martes por la Guardia Civil en una operación dirigida por un juzgado de Valencia y la Fiscalía Anticorrupción, según han informado fuentes de la investigación a eldiario.es. Se trata de un operativo en marcha en Madrid y Valencia. Zaplana está acusado de los delitos de blanqueo de capitales, cohecho y prevaricación por cobrar comisiones por la adjudicación de contratos de la Generalidad valenciana.
La operación efectuada por los agentes de Unidad Central Operativa (UCO) está ordenada por el Juzgado número 8 de Valencia en colaboración con la Fiscalía Anticorrupción.
