La simbólica morera centenaria del Paseo de la Dirección vuelve a pedir el indulto en el Pleno de Tetuán

En octubre de 2022 se inauguraban con gran boato las torres Skyline en el entorno del Paseo de la dirección. A la fiesta de los dos rascacielos de lujo, que simbolizan el cambio radical de la barriada después de un dilatado proceso de reurbanización cuyas heridas no han terminado de sanar, llegaban coches de lujo e invitados vestidos de fiesta. El vecindario, que no estaba invitado a la fiesta, miraba con una mezcla de curiosidad y asombro. Enfrente, alguien había apoyado su bicicleta junto a la vieja morera del promontorio de la calle Alberdi. Apuraba una manzana y miraba, indiferente al festín, en dirección al fabuloso atardecer de la cornisa de Tetuán. El mismo acontecimiento natural que los promotores de los pisos de lujo publicitaban en sus redes sociales.

Aquel ciclista era uno con la morera centenaria, testigo de muchos cambios en el barrio –todos–, reivindicada por los vecinos como símbolo de la supervivencia de su esencia entre los escombros de la destrucción creativa que, de la mano de la administración y los promotores inmobiliarios, ha cambiado de arriba abajo el barrio. La morera, sin embargo, tiene firmada una sentencia (provisional) de muerte por la construcción de una promoción de viviendas de la EMVS en el solar en el que está situada.

Unos meses antes, Marian y Marisa, dos vecinas de la zona, se habían plantado delante de las máquinas y se negaron a marcharse hasta que no se retirase el material de obra y derribo que los obreros que trabajaban en la urbanización de la calle Cosmos habían dejado a los pies del árbol, poniéndolo en peligro. Ambas eran partícipes de la lucha que la Casa Vecinal de Tetuán ha llevado a cabo durante años para pedir la supervivencia del ejemplar. Dirigieron escritos al Delegado del Área de Medioambiente y Movilidad del Ayuntamiento (y al propio alcalde); llevaron a cabo actos reivindicativos, como una campaña de fotos vecinales con el árbol; recogieron firmas y, por supuesto, la cuidaron.

En marzo de 2022 se aprobaron en el Pleno Municipal de Tetuán dos proposiciones, de PSOE y Más Madrid, en las que se pedía la protección del árbol y su integración en la promoción de vivienda pública que se ha de construir en el lugar.

Este jueves, el grupo Municipal Más Madrid volverá a llevar al Pleno Ordinario de Tetuán una proposición para preguntar por el estado de la cuestión de la misión institucional salvar la morera centenaria. Según la formación verde, “es necesario respetar un icono de un distrito que, poco a poco, va perdiendo su identidad debido a su privilegiada situación y a la especulación inmobiliaria que está sufriendo toda la ciudad”. Por ello, insiste en la necesidad de “buscar alternativas para protegerla y no trasplantarla, ya que esta medida, además de ser su fin, perdería lo que tiene de simbólica si no permanece integrada en su terreno”.

En su día el PP y Ciudadanos se abstuvieron en la votación aprobada, a pesar de lo cual, la concejala presidenta, Blanca Pinedo Texidor (del Partido Popular), expresó que el distrito haría lo posible para encontrar una solución a la conservación del árbol centenario y afirmó que Medioambiente y la EMVS ya estaban trabajando en hacerlo posible.

En la carta que la Casa Vecinal de Tetuán remitió a José Luis Martínez Almeida en agosto de 2021, se recordaba el valor simbólico de la morera: “vecinos y vecinas del entorno, que cuando acabó el confinamiento, ese mismo día, fuimos a reunirnos bajo las ramas de la morera”. Quisieron “transmitirle el valor de una sencilla morera, única superviviente de los múltiples árboles que allí existían. La morera habitaba junto a almendros, higueras, fresnos, olivos y otros árboles singulares. Pensamos que hoy en día, los árboles son todos singulares”.

 ¿Se renovará en el Pleno Municipal el compromiso con los vecinos expropiados a quienes recuerda el árbol y con aquellos que aún la tienen como referencia material de su pertenencia al Paseo de la Dirección? Los vecinos creen que su permanencia merece un esfuerzo de la clase política local y una pensada de los arquitectos de la EMVS.