Casado, sobre el piso de lujo de Ayuso: “Sigue vigente el código ético y haremos indagaciones si hubiera que hacerlas”

El líder del Partido Popular, Pablo Casado, ha asegurado este martes que el código ético de la formación conservadora que prohibe a los cargos del partido recibir regalos “sigue vigente”. Con esas palabras se ha expresado Casado al ser preguntado por el apartamento de lujo en el que pasa la pandemia la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, valorado en unos 6.000 euros al mes y que pertenece al empresario hotelero Kike Sarasola, que tiene intereses en la región. Ni Ayuso ni ningún miembro del Ejecutivo autonómico han explicado cómo se paga ese ático de lujo, aunque sí han asegurado que no está generando gastos a las arcas públicas.

“Por supuesto que sigue vigente el código ético que limita muy claramente las atenciones que se pueden recibir”, ha sostenido Casado en rueda de prensa. En el caso del PP de Madrid el código fue aprobado el 31 de marzo de 2016 –cuando Cristina Cifuentes acababa de hacerse cargo de la gestora que debía pilotar el partido hasta un congreso–, e incluye un artículo, el quinto, que establece las causas de renuncia de un cargo público.

El apartado 3 señala el siguiente supuesto: “Dar, ofrecer, aceptar o solicitar de forma directa o indirecta, regalos, favores, donaciones, invitaciones, viajes o pagos en atención al cargo o responsabilidad que ostente, que puedan influir en sus decisiones o en las de terceros para facilitar negocios u operaciones en beneficio propio o de terceros”. 

Según Casado, el PP ha “desarrollado” el código ético “con firma de cada cargo electo”. “Estoy convencido de que todos lo están siguiendo y si hubiera que hacer cualquier indagación así lo haremos”, ha matizado el líder de los populares en la rueda de prensa en la que ha presentado a su Gobierno en la sombra. Además, ha asegurado que existe una “campaña de desprestigio” contra el Ejecutivo de la Comunidad de Madrid. 

Además del código del partido existe otro código ético de la Comunidad de Madrid, aprobado el 31 de octubre de 2016, en un Consejo de Gobierno presidido por Cristina Cifuentes, que establece dentro de los criterios para una actuación imparcial que “los altos cargos no podrán aceptar, en consideración a su cargo, ningún tipo de regalo o beneficio de cualquier naturaleza, salvo las muestras de cortesía habitual”.

Reacciones de la oposición madrileña

Este martes, la secretaria de organización del PSOE en Madrid, María Carmen Barahona ha pedido a la presidenta que “salga ya de esa atalaya de lujo en la que se confinó hace más de dos meses” y explique “quién paga ese apartamento”. “El código ético de los altos cargos de la Comunidad y el propio de su partido, el PP, prohíben recibir regalos y beneficios que puedan condicionar sus actuaciones al frente de la Administración”, ha continuado. “¡Salga ya de esa madriguera de lujo!”.

Por su parte, el portavoz de Unidas Podemos-IU Madrid en Pie, Jacinto Morano, ha calificado de “preocupante” la información porque se trata de un piso de lujo “cedido gratuitamente por una entidad empresarial que simultáneamente ha contratado con la Comunidad de Madrid sin concurso público”.

“Solo sabemos que los representantes públicos no pueden recibir regalos de cuantías importantes por parte del sector privado, y menos de un sector privado con el que se contrata. Si esto es así, y no hay ningún elemento desconocido, sería una situación muy grave de la que se derivarían responsabilidades políticas”, ha lanzado Morano.

El Gobierno regional no se ha pronunciado todavía sobre esta cuestión, aunque este martes el consejero de Vivienda y Administraciones locales, David Pérez, ha defendido que se trata de “acusaciones falsas”. Pérez respondía a la pregunta del diputado de Más Madrid Jorge Moruno, en una comisión del área, que cuestionaba quién paga el apartamento o si se trata de un regalo.

“No todos los madrileños tenemos la suerte de tener amigos que nos dejen un apartahotel de lujo que cuesta 6.000 euros al mes, que por cierto nadie nos ha dicho quien lo paga, si se lo deja gratis, si lo pagamos todos o lo paga de su bolsillo. Eso estaría bien aclararlo, aunque tarde o temprano se sabrá”, ha lanzado Moruno.