Miles de personas piden en Madrid un alto el fuego en Palestina: “Seguiremos en las calles hasta que acabe la masacre”
Miles de personas se han manifestado por el centro de Madrid en solidaridad con el pueblo palestino y en contra de la connivencia que el Estado español todavía mantiene con Israel, han denunciado los convocantes, la Red Solidaria contra la Ocupación de Palestina (Rescop). Las marchas se han sucedido en más de 45 ciudades de todo el país. Exigen, una vez más, el embargo de armas al país liderado por Netanyahu y un alto al fuego inmediato y permanente en Palestina, Líbano, Siria y Yemen, así como la ruptura de relaciones económicas, políticas, culturales y deportivas con Israel.
Los manifestantes, hasta 20.000 según la Rescop, se han congregado desde las 18.00 horas en Atocha, de donde ha partido la manifestación. De esta forma, han conmemorado el Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, celebrado cada 29 de noviembre, tal y como estableció Naciones Unidas en 1977. “España sigue siendo lugar de tránsito de buques con armas que terminan utilizadas en un genocidio. Intentamos pararlos, pero es imposible que lleguemos a todos. Tiene que ser el Gobierno el que prohíba el paso de estos barcos por puertos españoles”, demanda Hania Faydi, portavoz de la Rescop.
Tras una primera pancarta que reza “Alto al genocidio en Palestina. ¡Viva la lucha del pueblo palestino?”, los congregados no han dejado de corear cánticos como “vosotros sionistas, sois los terroristas”, “dónde están, no se ven las sanciones a Israel” y “las tierras robadas serán recuperadas”. Faydi, por su parte, continúa señalando al Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez: “El Gobierno está muy lejos de la ciudadanía, que sí se muestra comprometida con la causa. Está muy bien reconocer a Palestina como Estado, pero eso debe materializarse en acciones que intenten terminar con la masacre que realiza Israel todos los días. Mientras tanto, nosotros seguiremos saliendo a las calles”, se explaya.
Es la primera marcha convocada por la Rescop después de que la Corte Internacional de Justicia decretara una orden de arresto por crímenes de guerra y de lesa humanidad contra el presidente israelí, Netanyahu, y su antiguo ministro de Defensa, Yoav Gallant. “Tenemos a la relatora especial de Naciones Unidas apoyando el embargo de armas y la ruptura de relaciones. ¿A qué espera nuestro Gobierno para dejar de normalizar a Israel ante la comunidad internacional?”, se pregunta la portavoz de la organización.
Desde la Rescop denuncian que Israel “lleva un año de genocidio”, pero no solo, sino “76 años de ocupación, colonialismo, limpieza étnica y apartheid”. Similar es lo que piensa Pilar, vecina de Madrid que esta tarde ha desfilado por el centro de la ciudad en solidaridad con Palestina: “A nivel social no estamos saliendo lo que deberíamos a la calle. Cada vez participan más jóvenes en estas movilizaciones, pero les seguimos echando de menos”.
El Gobierno, señalado
No es el caso de Hugo Román, alcalaíno de 21 años que no se resigna a pensar que no se puede hacer nada para parar “este genocidio en pleno siglo XXI”. Desde su punto de vista, los políticos y la sociedad en general “tendría que hablar mucho más de ello para no olvidar”. Además, este joven considera que “la orden de detención contra Netanyahu seguramente no sea muy efectiva”.
Entre las manifestantes, eso sí, se encontraba la ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego (IU), de origen palestino, quien ha tuiteado un “Palestina libre”.
Sobre ello también se ha pronunciado Miguel Urbán, integrante de Anticapitalistas, quien ha recordado que “el principal socio comercial de Israel es la Unión Europea, no Estados Unidos”. El político ha criticado que “el Gobierno progresista español es cómplice de lo que está sucediendo porque los gestos están bien, pero los gestos no paran un genocidio”. Además, ha recordado que el convenio suscrito entre la Unión Europea e Israel puede romperse si alguna de las dos partes viola los Derechos Humanos, y “no podemos olvidar que están siendo investigados por crímenes de guerra”, ha remarcado.
La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha defendido que el Gobierno español debería llevar a cabo “hechos concretos para terminar con el genocidio”. También ha remarcado que “Israel no solo es una amenaza para Palestina, sino para el conjunto de la ciudadanía del mundo, porque la seguridad nacional que depende de inteligencia israelí nos está poniendo en riesgo”. “Esas empresas buscan la represión y la criminalización de la ciudadanía que se organiza y defiende sus derechos”, ha finalizado.
Otra de las manifestantes que esta tarde de otoño se ha manifestado ha sido Ada, que iba repartiendo pequeños panfletos pidiendo ayuda para un amigo. “En los campamentos no entra la ayuda humanitaria y la inflación es increíble. Un kilo de tomates cuesta unos 55 dólares”, ha denunciado. Ella es amiga de Muhammed, con quien tiene un contacto fluido y el hermano de este, Amer, “corre grave peligro por una herida en la pierna provocada por un misil en Gaza”, reza el panfleto. “Es una medida algo personal e individual, pero intento ayudarles a que la gente se solidarice con ellos a través del GoFoundMe que han abierto”, ha añadido Ada.
Una oleada de solidaridad inunda Gran Vía
Una vez enfilada Gran Vía, los manifestantes han señalado a McDonald’s y Starbucks frente a sus locales como “cómplices del genocidio” al apoyar el régimen israelí. A las 20.00 horas la protesta ha llegado a su final, a unos 50 metros de la Plaza de Callao. Ante la mirada de viandantes obnubilados con la iluminación navideña del centro de la capital, los activistas han conseguido hacerse hueco y que su voz retumbara en el enclave después de guardar un minuto de silencio en recuerdo a los asesinados por Israel.
La Rescop ha recordado en su comunicado final, leído en castellano y en árabe, que en 1947, exactamente 30 años antes de la declaración del 29 de noviembre como Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, se aprobó, sin consultar con la ciudadanía palestina, el Plan de Partición que proponía dividir Palestina en un estado árabe y un estado judío. “Dicha resolución, la 181, sirvió como excusa perfecta para que el sionismo intensificara su plan de colonización y limpieza étnica, un proyecto que nunca se ha completado gracias a la resistencia del pueblo palestino, que sigue viva y firme hasta el día de hoy”, han añadido ante los congregados.
Asimismo, han criticado que “Europa, que históricamente se ha presentado como un referente en la defensa de los Derechos Humanos, no solo tolera, sino que participa activamente en la industria armamentística y firma acuerdos financieros opacos que benefician a un sistema que prioriza los intereses económicos sobre la vida humana y sobre el respeto a la legalidad internacional”. Además, consideran que ante la irresponsabilidad, la parálisis y la complicidad de algunos gobiernos, es imprescindible actuar desde la sociedad civil, en sus propios términos.
“Israel busca el conflicto regional”
La Rescop ha denunciado que “Israel, lejos de limitarse a Palestina, extiende su violencia al Líbano, Siria, Irán y Yemen, buscando un conflicto regional”, y han recordado que ya han bombardeado escuelas, hospitales, campos de refugiados, iglesias, mezquitas, convoyes de ayuda humanitaria y hasta sedes de la ONU. Por eso, no entienden cómo Israel “no solo no recibe sanciones, sino que los gobiernos occidentales siguen suministrando armas y manteniendo relaciones preferentes con un régimen investigado por crímenes de genocidio”.
Desde su perspectiva, reconocer un Estado palestino, en este contexto, se convierte en “un acto de hipocresía”. Algunos de los manifestantes ya se habían marchado de esta zona de Gran Vía, que rebosaba de banderas palestinas, cuando la lectura del comunicado ha llegado a su fin: “Debemos intensificar la presión de la sociedad civil mediante campañas como el BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones a Israel), iniciativas que ya han demostrado ser efectivas”.
Por último, los convocantes han expresado su apoyo a la resistencia que los palestinos llevan a cabo frente al “colonialismo, ocupación y apartheid” contra “la brutalidad ejercida por el régimen sionista”. Una vez más, la Rescop, apoyada por miles de voces congregadas hoy en Madrid, han exigido el embargo total de armas, un alto al fuego inmediato en las zonas atacadas por Israel, la ruptura de cualquier tipo de relación con el Estado liderado por Netanyahu y el fin de la ocupación y el apartheid en Palestina, y la prohibición de cualquier colaboración que lo perpetúe, tal y como exigió la Corte Penal Internacional el pasado 19 de julio.
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