Vecinos de Arganzuela intentan frenar en los tribunales la tala de cientos de árboles en Madrid Río
La pervivencia o la tala de más de 200 árboles en Madrid Río está ya en los juzgados. La asociación vecinal Pasillo Verde Imperial ha presentado este miércoles una denuncia ante la Fiscalía y el juzgado de guardia en Plaza Castilla para intentar frenar la deforestación prevista por la Consejería de Transportes en uno de los mayores parques de Madrid, con el objetivo de construir allí una de las nuevas estaciones de la línea 11 de Metro.
Los vecinos piden “medidas cautelarísimas” al juez “antes de que sea irreversible” la tala de decenas de árboles plantados en el año 1969. Todos se encuentran en el antiguo parque de Arganzuela, en una zona que el Gobierno de Díaz Ayuso prevé excavar para construir la estación de Madrid Río. Su ubicación era inicialmente bajo la calzada del paseo de Yeserías, pero una modificación del proyecto después del proceso de información pública metió esta infraestructura en mitad del parque.
En la denuncia presentada en la Fiscalía, los vecinos aseguran que el proyecto no ha sido sometido a la pertinente evaluación de impacto ambiental y acusan a la Comunidad de un delito ecológico por talar árboles de más de 50 años. Además alegan que esta zona de Madrid Río, con numerosas estructuras como un gran barco pirata, columpios y toboganes, es el lugar donde juegan los niños del barrio.
Pasillo Verde es una de las 12 asociaciones que convocan una concentración este sábado para mostrar el rechazo público a la destrucción del arbolado. Tendrá lugar a partir de las 12.30 bajo el lema Contra la destrucción de parques por las obras de ampliación de la línea 11. Entre otras formas de protesta, esta semana se ha desplegado una cadena humana y el apadrinamiento de los plátanos de sombra en peligro de derribo.
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