Panamá suma un récord de 1.540 casos en un día y acumula 932 muertes por COVID-19

Panamá, 13 jul (EFE).- Panamá registró este lunes la cifra récord de 1.540 casos positivos en un solo día y agregó 23 nuevas muertes por COVID-19, que elevan a 47.173 el acumulado de contagios y a 932 las defunciones en 126 días de pandemia en el país, que tiene una letalidad de 1,97 %.

Esta marca de registro de nuevos casos arroja una positividad de 43 % sobre la base de 3.590 pruebas de detección de contagio hechas en las últimas 24 horas, según el informe del Ministerio de Salud (Minsa) que reporta 23.919 pacientes (50,71 %) que se han logrado recuperar de la enfermedad.

Panamá, con una población aproximada de 4.300.000, es el segundo país de América, después de Chile, que tiene más casos de COVID 19 por millón de habitantes.

Los enfermos hospitalizados suman 1.164, de los cuales 1.005 se encuentran en sala general y 159 en las unidades de cuidados intensivos de todo el país.

En aislamiento domiciliario se contabilizan 20.500 personas, y otras 658 que han sido trasladadas a hoteles que funcionan de forma temporal como hospitales.

Los hoteles-hospitales son una “herramienta importante para evitar que la red hospitalaria se vea saturada”, y donde se ubican a personas diagnosticadas con COVID-19 y cuyos domicilios no ofrecen condiciones para el aislamiento, ha señalado el Minsa.

Hasta la fecha, desde que se detectó en Panamá el primer caso el 9 de marzo pasado, se han realizado 168.517 pruebas de contagio por el nuevo coronavirus, 70 % negativas (118.412) y 30 % positivas (50.105).

Las pruebas por millón de habitantes ascienden a 39.386, con 3.590 nuevas muestras efectuadas en las últimas 24 horas, para una positividad de 43 %.

Las muertes por el rango de edad se concentran entre las personas con más de 60 años, que acumulan 664 del total de 932 fallecimientos, según el informe del Ministerio de Salud.

Panamá, que atraviesa por una creciente escalada de casos, paralizó a mediados de marzo pasado toda la actividad económica no esencial.

Organizó un proceso de apertura gradual dividida en seis bloques que comenzó el 13 de mayo y permitió el reinicio de dos de ellos, pero se suspendió por el rebrote de COVID-19 que se encuentra en pleno desarrollo.

Los sectores esenciales como alimentos, salud, seguridad, transporte, entre otros, nunca han parado en el país, pero permanece cerrado todo el comercio y las escuelas, y están suspendidos los eventos masivos culturales y deportivos.

La provincia de Panamá, donde está la capital, y la contigua de Panamá Oeste, son las zonas con más alta incidencia de casos con 28.397 y 8.277, respectivamente, por lo que en ellas rigen las más fuertes restricciones de movilidad para contener la propagación del virus, como una cuarentena los fines de semana mientras en el resto del país hay un toque de queda nocturno.

Este repunte sostenido de casos hizo que la Sociedad Panameña de Medicina Interna recomendara a las autoridades el establecimiento de una cuarentena total en ambas provincias por un periodo de 15 días.

También este fin de semana, se pronunció la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap) y la Asociación Panameña de Ejecutivos de Empresa (Apede), que plantearon al Gobierno analizar la estrategia utilizada hasta ahora para enfrentar la pandemia.