Las instituciones toman conciencia contra la transfobia el próximo 20 N
El 20 de noviembre es el Día Internacional de la Memoria Transexual y la Plataforma por los Derechos Trans ha pedido la implicación de las instituciones para que esta fecha forme parte de la agenda institucional en la defensa de los derechos de las personas trans y contra las transfeminicidios. Ni en Andalucía ni España se conocen asesinatos en este sentido pero hechos muy recientes como la brutal agresión en Málaga ya juzgada o los golpes recibidos por un joven de Granada en febrero hacen que esta cuestión no deba pasar desapercibida en aras de la igualdad.
La federación de asociaciones trans de Canarias, Catalunya, Madrid, Aragón y Andalucía quiere que se conmemore este día dedicado a la memoria de aquellas personas que han sido asesinadas víctimas de la transfobia, el odio y el miedo a las personas trans, así como para recordar la violencia continua que sufre la comunidad trans.
Los consistorios de Cádiz, Huelva, Granada, Málaga, Córdoba, Sevilla, Madrid y Zaragoza, los parlamentos regionales de Andalucía y Canarias, así como la Asamblea de Madrid, el Parlament de Cataluña y las Cortes de Aragón, además del Congreso de los Diputados y el Parlamento Europeo, tienen ya encima de la mesa la propuesta de la plataforma de cara a este 20N, consistente en izar la bandera trans e iluminar algún monumento o fachada en su ciudad con los colores de la bandera trans.
La iniciativa también conlleva que ayuntamientos y parlamentos autonómicos hagan suya una declaración institucional condenando los transfeminicidios e instando a las Naciones Unidas a que sus estados miembros integren, en la medida de sus posibilidades, los principios de Yogyakarta en la aplicación e interpretación de la legislación interna y los tratados internacionales sobre derechos humanos en relación con la identidad de género.
Según la plataforma, varias de estas instituciones han confirmado que apoyarán la propuesta y que en esta semana se irá concretando. Málaga el jueves 17, Córdoba el 18, Cádiz el día 19 o Sevilla el 21 ya han confirmado. La plataforma ha enviado una carta a los grupos políticos de todas estas instituciones donde se les recuerda que el Día Internacional de la Memoria Transexual, en inglés Transgender Day of Remembrance, “tiene como finalidad darles rostro y voz a aquellas víctimas de la violencia transfóbica, así como hacer visible nuestra exigencia a vivir una vida libre de violencia y poder ejercer nuestros derechos como el resto de la ciudadanía”, ha dicho la plataforma en una nota.
Más de 2.000 personas asesinadas en ocho años
Según los datos del Observatorio de Personas Trans Asesinadas hecho público el pasado marzo, en los últimos ocho años se han asesinado a más de 2.000 personas trans en 65 países, en su inmensa mayoría mujeres trans, reflejando un aumento significativo y constante de los informes de asesinatos de personas trans en los últimos tiempos. Más de 1.500 se dieron en América del Sur y América Central. Según el estudio, el 65% de todas las personas trans y de género diverso asesinadas cuyas profesiones se conocen eran trabajadoras sexuales.
“Ante esta alarmante situación que constituye un TransFeminicidio, la Plataforma por los Derechos Trans insta a todas las instituciones a que se marque este día en el calendario de fechas onomásticas, se condenen los asesinatos y todas las formas de violencia de las que son víctimas las personas trans -en especial las mujeres trans- y se exija el fin de este TransFemicidio”.
“Las obligaciones legales que los estados tienen para proteger a las personas trans frente a la violencia y la discriminación no son diferentes de las que los estados tienen para la ciudadanía. Los derechos de las personas trans no están segregados y no son un subconjunto especial de derechos sino que son derechos humanos”, declara Mar Cambrollé, presidenta de la Plataforma por los Derechos Trans.
Cambrollé añade que “las personas trans no son inferiores y tienen derecho a la vida, como cualquier ser humano. Se les debe procurar protección contra la detención arbitraria y la tortura, garantizar la no discriminación y la libertad de expresión, asociación y reunión. Estos derechos y muchos otros son universales, acreditados en las leyes internacionales aunque negados a muchas personas trans, simplemente por su identidad de género o expresión de género”.
