Compromiso para proteger el empleo
Hace pocos días en Canarias sucedía algo histórico. Una vez más, sindicatos, patronal y Gobierno firmaban una propuesta del Consejo Canario de Relaciones Laborales a la Comisión Tripartita Laboral en materia de ERTE.
Este acuerdo, fruto del diálogo Social, no es más que el compromiso manifestado el pasado 30 de mayo en el Pacto para la Reactivación Social y Económica de Canarias que recoge la defensa de la extensión de los ERTE de fuerza mayor para las actividades turísticas y las vinculadas, directa o indirectamente, a las mismas.
Esta actividad turística supone el 35% del PIB en Canarias y supone el 40% del empleo y, por supuesto, el Gobierno central atiende a nuestra situación de lejanía e insularidad y como región ultraperiferica de Europa, tiene en cuenta nuestras particularidades hasta la reanudación del tráfico aéreo internacional.
Desde el 17 de marzo, en nuestro país, se ha tomado el firme compromiso con la protección del empleo para afrontar la situación de crisis sanitaria, propiciando elementos de seguridad jurídica y garantías laborales vitales en tanto en cuanto la pandemia siguiera presente en el mundo. Estas medidas de protección de empleo generaron en Canarias decenas de miles de solicitudes de ERTE por causas de fuerza mayor que permitieron la suspensión del empleo y no su total extinción.
Pero eso no ha sido suficiente para el gobierno, que, atendiendo a datos objetivos que reflejan que Canarias es una de las comunidades autónomas más afectadas por la pandemia, económica y laboralmente hablando, ha tendido puentes para que podamos seguir luchando por un empleo digno y de calidad en nuestra tierra, protegiendo las relaciones laborales y dando la oportunidad a las personas trabajadoras de canarias de no ver mermada su capacidad económica ante la circunstancia sobrevenida, y esperemos que coyuntural, de una pandemia manteniendo el porcentaje de la cuantía a percibir en el 70% y eliminando la posibilidad de su reducción al 50%.
Al igual que en Canarias, confiamos también en que los agentes sociales y económicos lleguen a buen puerto con sus negociaciones, fruto también del diálogo social, diferentes comunidades autónomas que protegerán a los trabajadores y trabajadoras prorrogando los ERTES, y por lo tanto, protegiendo el empleo.
Este compromiso real y objetivo, unido a las últimas declaraciones de la ministra de Turismo, Reyes Maroto, sobre la puesta en marcha de un plan específico para la recuperación turística de Canarias que tiene como objetivo ayudar a esa recuperación de las islas y de su actividad turística, y como realidad la prórroga de los ERTE para Canarias, ha suscitado por parte de algunos grupos políticos algún tipo de recelo.
Más que defender los derechos de las personas trabajadoras, se rasgan las vestiduras, con cierto afán de protagonismo, porque el gobierno no prorrogó los ERTE desde el primer momento.
Quizás sería conveniente recordarles, y no quisiera yo importunarlos, que la figura de los ERTE ya existía antes de esta pandemia. De hecho, ya existía cuando, intencionadamente, se intentó eliminar como garantía de protección de empleo en la famosa reforma laboral de los populares del 2012, aprobada unilateralmente con mayoría absoluta del PP, dándole aún más importancia a los Expedientes de Regulación de Empleo (ERES) extintivos, con sus inimaginables efectos negativos si se hubiera aplicado actualmente.
Los ERTE y su prórroga suponen un compromiso real de este gobierno con la consolidación y protección del empleo en las islas, además de otorgar seguridad jurídica laboral a la ciudadania canaria y a las empresas. Pero el objetivo va más allá, y es que los ERTE no solo se prorrogan para el sector turístico, sino para todos los sectores que en Canarias tiene alguna vinculación directa o indirecta con el turismo, que en esta tierra, son muchísimos.
A fin de cuentas, garantizar el estado del bienestar a toda la ciudadanía canaria es lo que debe preocuparnos y, especialmente, ocuparnos. Y que por una vez, y esta vez de verdad, la oposición canaria sumara fuerzas para mantenerlo.
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