Castilla-La Mancha pedirá al Gobierno de España que Tarancón pueda abastecerse desde la tubería manchega

El presidente regional ha confirmado en Cuenca que “en estos días vamos a pedir, formalmente al Ministerio, que se pueda incorporar también Tarancón a la tubería manchega”. Emiliano García-Page lo anunciaba durante la clausura de la asamblea general la CEOE CEPYME Cuenca en la que participó junto al presidente regional de la organización empresarial, Ángel Nicolás y el responsable provincial de CEOE CEPYME, David Peña, entre otros representantes del tejido empresarial.

El trasvase de la Llanura Manchega conocido también como tubería manchega es una canalización desde Carrascosa del Campo en Cuenca, hasta el embalse de Gasset en la provincia de Ciudad Real. Conduce agua para consumo humano desde la cabecera del Tajo, a través del trasvase Tajo-Segura, hasta llegar a un embalse regulador en Carrascosa del Campo.

Fue en 2008 cuando el Consejo de Ministros autorizó el contrato de las obras del anteproyecto para la elaboración del proyecto y construcción de la primera fase de la estación de tratamiento de agua potable en cabecera de la red de abastecimiento a la Llanura Manchega, en la provincia de Cuenca con una inversión de 34,7 millones de euros.

El anteproyecto tenía por objetivo la definición, justificación y valoración de las obras e instalaciones necesarias para la construcción de la estación de la Llanura Manchega para abastecer a 58 municipios de las provincias de Ciudad Real, Cuenca y Albacete, con un caudal de 9.630 metros cúbicos por hora.

El Gobierno autonómico presidido entonces por José María Barreda había cerrado el 14 de marzo de 2005 un acuerdo calificado de “histórico” por la Junta con la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona y que contemplaba que contempla lo que se calificó de “ambicioso plan de inversiones” así como las enmiendas introducidas por Castilla-La Mancha al texto del Plan Hidrológico Nacional.

El proyecto se concibió para abastecer de agua a municipios de la región en los que viven unos 600.000 habitantes. En 2009, el presidente regional José María Barreda hablaba de una inversión de 400 millones de euros para cerca de 1.000 kilómetros enterrados de tuberías y ramales que asegurarían el abastecimiento de agua a los pueblos con problemas de sequía en las áreas ribereñas a la cabecera del Tajo de Cuenca y Guadalajara, en aquellos lugares por los que pasa el propio acueducto y también en la Llanura Manchega. Pero en 2013, con los gobiernos de Rajoy en Madrid y de Cospedal en Toledo el proyecto se paralizó. PP y PSOE se culparon mutuamente. Los primeros alegando que no había financiación suficiente por la mala gestión socialista de etapas anteriores. Los segundos asegurando que la paralización coincidía con otra obra de abastecimiento a Murcia y que el Gobierno de Rajoy habría priorizado. En concreto, el proyecto para conectar las localidades murcianas de Yecla y Jumilla con las Canales del Taibilla, por donde transcurre el agua del trasvase del Tajo al Segura.

En febrero de este año la Junta de Castilla-La Mancha iniciaba una obra con carácter de “urgencia” debido a los “serios” problemas de abastecimiento de agua en Bolaños de Calatrava y Almagro y con el objetivo de asegurar el abastecimiento de agua potable a los doce municipios que conforman el Consorcio del Campo de Calatrava. Se hizo “a la espera” de la entrada en funcionamiento de la tubería manchega que, a pesar de que el primer ramal ya está construido, debido a la falta de uso, la Confederación Hidrográfica del Guadiana ha tenido que acometer obras de reparación “por el desuso y el vandalismo”. 

Ya en abril la Comisión Central de Explotación del Acueducto Tajo-Segura (ATS) dio luz verde a una derivación excepcional de agua desde la cabecera del Tajo, entre Cuenca y Guadalajara, hacia la cuenca alta del río Guadiana de 3 hm3 para atender las necesidades para abastecimiento con motivo de las pruebas previstas en el proyecto de reparación y puesta a punto de la infraestructura de la tubería manchega. 

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO) recordaba entonces que “está trabajando ya para la puesta en marcha de la denominada tubería manchega y uno de los primeros pasos para ello ha sido el diagnóstico de su situación”. En septiembre de 2021 el MITECO formalizó un contrato para el estudio del estado actual de la infraestructura y la redacción del proyecto para su reparación. Esta prueba de la tubería “servirá para avanzar en la tramitación de su puesta en funcionamiento”, aseguraba.