La lava engulle la gasolinera de La Laguna y sigue su paso hacia el casco del barrio
Las coladas 8 y 10 del volcán de Cumbre Vieja, en La Palma, que son las que arrasaron el supermecado Spar y el campo de fútbol de La Laguna, respectivamente, siguen siendo la principal preocupación para la dirección técnica del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) este miércoles. Ambas lenguas tienen bastante aporte de calor, pero hay un apéndice intermedio a estas dos que es de la que pende el futuro del centro del barrio de La Laguna.
Así lo ha explicado el director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, quien detalló en la rueda de prensa para actualizar los datos de la erupción, que en dicho apéndice es “muy potente” el aporte de calor, lo que ha provocado que durante la jornada se dirija “rápidamente” a la gasolinera lagunera. De hecho, esta quedó sepultada por la lava pocos minutos después.
La colada número 10 (nombre que le da la Unidad Militar de Emergencias según su cronología) es la que se dirige hacia el colegio de La Laguna.
El peor escenario se daría si este grupo de coladas se dirigiera al norte de la montaña de La Laguna, lo que se sabrá en las próximas horas, ya que todavía cabe la posibilidad de que se frenen y ganen altura. Sin embargo, si se “derraman” al norte de la montaña se creará un nuevo “transporte” de la carga de lava y podría arrasar nuevas edificaciones y muchos cultivos a lo largo de la carretera de la costa, indicó Morcuende, quien ha reiterado que lo deseable es que las coladas sigan topográficamente la vaguada que tienen al sur de la montaña.
La lengua más cercana al mar (la que está más al norte) y que discurre al sur de la montaña de La Laguna, se encontraba durante las primeras horas de esta tarde a 130 metros de la línea de costa y a unos 80 metros del corte del cantil. En este sentido, como expresó el experto, en cuanto llegue a esta zona, se procederá al confinamiento de los núcleos de San Borondón, La Condesa, Marina Alta, Marina Baja y el casco de Tazacorte, en previsión de la emisión de gases que produzca el contacto de la lava con el mar. La anchura máxima entre las coladas extremas se mantiene en 2.900 metros.
Hectáreas y edificaciones destruidas
En cuanto a los datos diarios de superficie afectada, hay 807,85 hectáreas arrasadas, 27,96 más que este martes. Los datos del Catastro muestran que ya hay 1.122 edificaciones destruidas, de las cuales 902 son de uso residencial, 115 agrícolas, 56 industriales, 25 destinadas al ocio y hostelería, 10 de uso público y 13 destinadas a otros fines.
Por otro lado, un total de 245,88 hectáreas de cultivo también se han visto afectadas, 11,62 más que el día anterior. De este total, 139,59 pertenecen a plataneras, 52,93 a viñedos y 19,49 a aguacateros.
Columna de cenizas
La portavoz científica del Pevolca, María José Blanco, ha recordado que el nuevo centro de emisión que el martes emitía columnas muy oscuras ha empezado hoy a tener actividad estromboliana.
En cuanto al delta lávico, ha alcanzado los 120 metros de profundidad y probablemente esta sea superior, con fragmentos a 360 metros de profundidad, con una disminución de la fluorescencia en los primeros 400 metros, en donde no se detecta presencia de vida bentónica ni pelágica alguna, al menos en observaciones visuales.
La altura del penacho de gases y cenizas del cono principal ha alcanzado hoy los 3.500 metros y se prevé que las condiciones meteorológicas de las próximas 48 horas sean favorables para la operatividad del Aeropuerto de La Palma y de los del resto de islas.
Sin embargo, no se descarta la llegada de ceniza a El Hierro, ha continuado María José Blanco, quien ha señalado que la emisión de dióxido de azufre en el entorno del volcán de Cumbre Vieja se ha situado en 7.513 toneladas diarias, y la emisión difusa de C02 muestra una tendencia descendente, con 703 toneladas al día.
En Puntagorda, Breña Baja y Los Llanos de Aridane se han registrado picos altos de concentración de micropartículas, lo que puede estar relacionado con el aumento en la intensidad del viento y la dispersión de las cenizas acumuladas, junto a la entrada de polvo en suspensión.
Al respecto Miguel Ángel Morcuende ha destacado que no hay problema alguno para las zonas pobladas en las inmediaciones del volcán y ha indicado que tras remitir la calima, la calidad del aire empieza a ser “moderadamente buena, y en el peor de los casos, regular”.
En relación a la calidad del aire, en el día de hoy ha mejorado debido a que la aspección sahariana ha empezado a decaer, por lo que se han levantado las recomendaciones de autoprotección para la población de El Paso.
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