Castilla-La Mancha advierte a Podemos de que no pueden tomar a la región como “rehén”
La primera reacción del Gobierno de Castilla-La Mancha tras el anuncio de Podemos de romper el pacto de investidura con Emiliano García-Page ha sido de “máxima sorpresa”. La segunda, comunicar su convencimiento de que la decisión no tiene nada que ver con la política regional, sino a circunstancias “ajenas” a Castilla-La Mancha. “No es entendible que hace una semana estuviéramos aprobando el techo de gasto y negociando los presupuestos para el año 2017”, aseguró el vicepresidente regional, José Luis Martínez Guijarro.
El político mantuvo su argumento en esta línea: recordó que a lo largo de la celebración del último Pleno de las Cortes, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas que lo acompañó en la comparecencia, estuvo negociando con Podemos para hablar de los presupuestos de 2017. “Y días después se habla de la ruptura del acuerdo de investidura”, apuntaba.
Guijarro ha defendido que de las 72 medidas que constan en el documento rubricado ante notario se han cumplido 41, es decir, el 57%. Por otro lado, afirmó, las que todavía siguen pendientes, lo están debido a que se acordó esperar a un nuevo Gobierno central en España, como son la reforma del Estatuto de Autonomía, de la ley electoral y de Gobierno y Consejo Consultivo. En este sentido, quiso apuntar que la última ya se está tramitando en el trabajo de una comisión parlamentaria.
Ni moneda ni cambio ni rehén
“Por lo tanto, no sirve como justificación la situación política de Castilla-La Mancha. Desde el minuto 1, el Gobierno ha trabajado por el cambio y ha estado cumpliendo los acuerdos y trabajando en la recuperación de derechos y servicios públicos”, sentenció el vicepresidente de la Junta de Comunidades. Guijarro citó iniciativas gubernamentales como el Plan Extraordinario de Empleo, y las medidas para “recuperar profesionales” en Sanidad y Educación.
Así, desde el Gobierno regional insistían una y otra vez en que la decisión “no se corresponde con la realidad política de Castilla-La Mancha”, y por tanto inician una reflexión. “Si alguien quiere usar a la región como moneda de cambio o rehén por la situacio política nacional se equivocan y mucho. Creo que esta decisión produce unas dudas importantes sobre la fiabilidad de quienes pretenden formar un gobierno en España, ya que rompen los pactos en aquellos territorios en los que se está trabajando para la recuperación de derechos sociales”, afirmó José Luis Martínez Guijarro.
La Junta, aseguró su vicepresidente, seguirá trabajando en los acuerdos de investidura y los presupuestos de 2017 y ha pedido también a Podemos que su periodo de reflexión sea “breve” para abordar “con absoluta normalidad” los asuntos y proyectos de Ley que están sobre la mesa actualmente. Además, han hecho un llamado de tranquilidad, asegurando que el trabajo diario seguirá en Castilla-La Mancha.
Guijarro ha señalado, finalmente, que el Gobierno regional espera que esta decisión haya sido producto de una “pesadilla de alguien de Podemos” y ha señalado que las declaraciones de Pablo Iglesias demuestran que “alguien de Madrid” quiere tomar como rehén al Gobierno de Castilla-La Mancha. “Por algún sitio tenían que empezar y, desgraciadamente, han elegido Castilla-La Mancha”, lamentó. Finalmente, ha señalado que habrá que prorrogar los presupuestos de 2016 si la rotura del acuerdo fuese completamente definitiva y no se pudiesen aprobar las cuentas para 2017.
