La consejera de Sanidad de Castilla y León rechaza la polarización del debate entre el Gobierno y Madrid y pide soluciones y concordia
La consejera de Sanidad de Castilla y León, Verónica Casado, ha rechazado este martes la “polarización” del debate entre el Gobierno de España y la Comunidad de Madrid para adoptar medidas que frenen la escalada de contagios de COVID-19. En una rueda de prensa en la que ha informado de la situación en Castilla y León, Casado ha reclamado “criterios y umbrales” que se apliquen de la misma forma en todas las comunidades.
La consejera ha recordado que Castilla y León ya pidió esos umbrales al Ministerio durante la fase de desescalada y que se aportaron, pero ligados a determinar las fases que se iban desescalando en los territorios. “El debate tiene que ser técnico, basado en criterios epidemiológicos y sanitarios. Pedimos al Consejo Interterritorial unos umbrales y una toma de decisiones basadas en evidencias científicas”, ha reclamado. Por ello ha insistido en que un momento en el que la situación es “tan grave” hay que buscar soluciones en un clima de “concordia”.
Así, ha insistido en que hay que avanzar porque las medidas van a beneficiar a todo el mundo, en términos de salud y no entrar en debates que la población no entiende mientras hay que realizar esfuerzos que frenen la prevalencia de la COVID-19.
Castilla y León, tercera en número de ingresos
Sobre la situación de Castilla y León, la consejera ha advertido que el aumento de ingresos en planta y en UCI empiezan a ser preocupantes dado el crecimiento contenido de los contagios. El índice de reproducción en la Comunidad es del 1,04, pero por encima de esa cifra están ya Burgos, León, Segovia, Soria, Valladolid y Zamora. Por debajo de esa media están Ávila, Palencia y Salamanca.
En este momento, Castilla y León es la tercera Comunidad en número de ingresos en los últimos 7 y 14 días, y la segunda en ingresos en UCI. Las plantas hospitalarias se mantienen con un 76% de ocupación y las UCIs en un 67%. Los hospitales que empiezan a registrar tensión son los Clínicos de Valladolid y Salamanca y el Río Hortega de Valladolid. Por el momento no se ha limitado la actividad quirúrgica aunque hay camas UCI extendidas en algunos de estos centros. Este martes hay 106 pacientes en la UCI y 166 camas de críticos ampliables a 230. Casado ha recordado que es necesario mantener la actividad hospitalaria normal porque además los enfermos de COVID-19 hay otras enfermedades que atender.
Si los ingresos siguiesen aumentando se pondrían en marcha las UCIs extendidas si bien se podrá contar con camas adicionales de planta en el antiguo hospital Río Hortega, donde están acabando las obras necesarias.
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