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El festival Miradors de l’Horta reivindica el uso turístico y cultural de la huerta
El diseño llega a la huerta valenciana invitado por la Mancomunitat de Carraixent y con las propuestas artísticas de la Asociación de Diseñadores de la Comunitat Valenciana. Así, coincidiendo con la València Disseny Week (17-20 septiembre), se celebrará la primera edición de Miradors de l’Horta, el primer festival que une el diseño y la cultura de la huerta valenciana para rendir homenaje a la misma.
El presidente de la Mancomunitat del Carraixent, Llorenç Rosado, ha explicado durante la presentación del festival en Las Naves que “también se puede hacer turismo en la huerta”, siempre y cuando se conviva y se respete el espacio. De la misma manera, el presidente de la Asociación de Diseñadores de la Comunitat Valenciana, Ángel Martínez, ha recordado que cuando la Mancomunitat se puso en contacto con ellos acordaron que el festival se apoyaría en el diseño, la gastronomía, la cultura, en “mucha huerta” y en la arquitectura efímera. Este último componente es “el principal reclamo”, ya que la programación incluye tres instalaciones a pie de huerta.
El objetivo del festival, aseguran, es invitar a la reflexión sobre el valor paisajístico, cultural y gastronómico de la huerta, así como reivindicar mediante el diseño los valores de la tierra y de las personas que la trabajan y viven de ella. “Diseño y huerta han dado como resultado estos conceptos y estas reflexiones”, apunta Martínez.
Así, del 17 al 22 de septiembre, la misma tierra que ve menguar su huerta con la ampliación de la carretera V-21, reivindica su valor con este festival que, “sin convertirse en un parque temático”, quiere atraer al visitante y transmitirle su importancia. “No hemos planteado este festival como cualquier otro. No queremos que vengan ríos de personas, sino un goteo controlado”, explicaba Jaime Pire, de la organización de Miradors de l’Horta.
En este sentido, el festival también ha programado talleres, visitas en bicicleta, actividades culturales y música en directo durante el fin de semana, así como un mercado de kilómetro 0 en el que se podrán degustar los manjares de la huerta valenciana.
Un corazón que late en plena huerta
El festival Miradors de l’Horta instalará del 17 al 22 de septiembre tres obras que se ubicarán en plena huerta con la finalidad de generar espacios donde poder reflexionar sobre el valor y el futuro de la huerta. El primer mirador, De l’horta al Plat de Limoestudio, reivindica el consumo de productos de kilómetro 0 y se alza sobre una estructura compuesta por cajas de fruta y verdura. Se instalará en Roca-Cúiper.
La instalación Tots som l’horta del equipo Carmen Baselga y Gallén+Ibáñez invita a través de un juego de espejos ubicado en un campo de coles de Vinalesa a la introspección y a buscar la conexión con la tierra.
Por último, la tercera de las instalaciones se compone de un corazón rojo de tres metros que brillará por la noche y se podrá ver en la huerta de Almàssera. Tal como han comentado sus diseñadores, Isabel Chover y Ricardo Alcaide, la obra pone en valor la tradición, “la huerta como ser vivo” y el cultivo como forma de vida. Asimismo, guías turísticos locales acompañarán a los visitantes.
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