El calor obliga a reducir horarios en varios centros educativos de la región
Una decena de centros educativos han confirmado a la Consejería de Educación que van a establecer medidas especiales frente al calor. La semana ha comenzado con temperaturas de pleno verano y una alerta amarilla en la provincia de Badajoz, aunque se espera que el termómetro comience a dar una tregua a partir del miércoles.
El comienzo del curso académico ha traído como novedad la posibilidad de que los centros escolares de Extremadura puedan reducir la jornada lectiva, siempre que se active una alerta por ola de calor. Una opción elegida por el colegio de Cheles, junto con el IESO y el colegio de La Garrovilla. Entre otros se suman el IES Maestro Domingo Cáceres y el IES Bioclimático, ambos de Badajoz. También en la capital pacense los CEIP Nuestra Señora de Fátima y Leopoldo Pastor Sito, según informa la Consejería de Educación.
El calendario escolar
Desde la Junta recuerdan que el calendario escolar, consensuado entre la Administración y la comunidad educativa, recoge la posibilidad de que los centros educativos adopten medidas extraordinarias en circunstancias meteorológicas excepcionales.
Ante una alerta las direcciones o titulares de los centros docentes de Educación Infantil, Primaria, Secundaria y Educación Especial, previo informe favorable de su correspondiente Consejo Escolar, podrán acordar desarrollar actividades adaptadas a la situación climatológica, lo que podría incluir, en su caso, la reducción de la jornada lectiva del alumnado.
Cada centro es autónomo y tiene la potestad de marcar el horario excepcional durante el tiempo que dure la alerta. De modo que la salida de clase se determinará en cada situación concreta, previa comunicación a los progenitores de los menores.
La Consejería de Educación explica que se asegurará la posibilidad de que aquel cuya familia lo solicite pueda permanecer en el centro hasta la finalización de las actividades lectivas que correspondieran normalmente o bien no asistir a clase durante esos días, previa comunicación a la dirección o titularidad. También se garantizarán los horarios y prestación de los servicios de comedor y transporte escolar.
Dar publicidad a la medida
La dirección o titularidad del centro deberá comunicar, de forma inmediata, las medidas adoptadas a esta Secretaría General de Educación y darles la adecuada publicidad, “informando, expresamente, de la garantía de permanencia en el centro durante toda la jornada lectiva habitual del alumnado cuya familia lo solicite”.
Ante la necesidad de que contar con el visto bueno de los consejos escolares, CSIF había reclamado la elaboración de un protocolo autonómico, bien definido, y que se aplique automáticamente, sin que se tenga que esperar a la convocatoria de una reunión del Consejo Escolar.
Desde la Consejería de Educación aclaran que la cuestión de la consulta al consejo escolar de cada centro no es un obstáculo. Señalan al caso del IES Maestro Domingo Cáceres, de Badajoz, que en la mañana de este mismo lunes ha celebrado reunión de su consejo escolar y ha hecho una comunicación a los padres y madres de su alumnado, a través de Rayuela. Les han transmitido que, si lo consideraban, podían acercarse a por sus hijos a la hora que haya establecido el centro.
Otras alternativas
La Federación de Enseñanza de USO-Extremadura aboga por compaginar la opción de impartir clases con una temperatura límite de 27 grados, como marca la normativa, y la conciliación laboral y familiar. Consideran que no se puede 'soltar' a los alumnos a las doce de la mañana porque haga mucho calor. Apuntan a otras medidas como buscar otras aulas o zonas del centro donde haga menos calor o el reagrupamientos de alumnos.
Por su parte la Coordinadora Estudiantil de Badajoz (CEB) denuncia que desde el inicio del curso se sufre un calor exagerado en las clases y avanzan que llevarán a cabo acciones de protesta “si no hay soluciones en 48 horas”.
Los alumnos consideran que se incumple el Real Decreto 486/1997 que regula las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo, que obliga a una temperatura comprendida entre los 17 y los 27 grados, informa la Agencia Efe. Afirman que en varios institutos profesores han sacado a los estudiantes de las clases y los han llevado a los pasillos o al recreo para evitar males mayores.
Aires acondicionados en las aulas
Los estudiantes exigen a la Junta que instale aire acondicionado en todas las aulas de cada instituto. Al ser una medida a medio o largo plazo y se necesita una “solución ya”, piden al Ejecutivo autonómico y a los directores de los institutos que elaboren un plan urgente para las próximas 48 horas.
Ante las reclamaciones de la coordinadora estudiantil la Junta señala que tiene previsto ejecutar un nuevo Plan de Mejora de la Eficiencia Energética en centros educativos, por valor de 15 millones de euros.
De esta inversión hasta 10 millones se destinarán a los centros de Educación Infantil y de Primaria y 5 para los de Secundaria. El plan se iniciará con un estudio de las necesidades de la red de centros educativos de las zonas rurales de Extremadura.
En la primera fase de actuación el estudio se centrará en evaluar cómo está la envolvente térmica de los centros educativos e incidirá en las carpinterías exteriores, los vidrios, las persianas, las cubiertas y en las fachadas.
“Éstas, además de su innegable aportación a la mejora de la eficiencia energética, son unas actuaciones muy demandadas por la comunidad educativa, debido al alto grado de confort que se consigue con ellas”, explican fuentes de la Consejería de Educación.
Para este proceso se ha dividido el territorio extremeño en 14 zonas y, para cada una de ellas, se va a contratar un estudio y una redacción de proyecto, donde se recojan las mejoras necesarias que se deben realizar en los centros de ese entorno. Los técnicos del servicio de Obras de la consejería supervisarán y priorizarán las actuaciones.
Estos fondos se sumarán a los 140 millones del Plan de Infraestructuras Educativas, aprobado por mayoría absoluta en 2016 en la Asamblea de Extremadura, y permitirán actuar en materia energética en aquellos lugares donde el Plan de Infraestructuras Educativas no está llegando ya.