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Las tres rutas de senderismo que puedes hacer en el pueblo con el nombre más largo de España

Camino nevado a Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago.

Héctor García Alonso

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A lo largo de la geografía española, varios enclaves destacan por alguna de sus singulares características, como una marcada historia, una gran conservación de su patrimonio o por estar rodeada de entornos naturales únicos. Sin embargo, un municipio ubicado en la vertiente sur de la Sierra de Guadarrama, en lo más profundo de la Comunidad de Madrid, sobresale por otra rasgo muy particular.

La localidad de Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago, en el margen izquierdo del río Lozoya, destaca —de entre todas sus virtudes— por tratarse del pueblo con el nombre más largo de España. Así, este espacio rodeado de una naturaleza propia de la sierra en la que se encuentra, se erige como una alternativa idónea para descubrir la historia y el entorno que lo rodea mediante una o varias rutas de senderismo.

La historia de Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago

Gargantilla del Lozoya fue fundado después que el pueblo de Garganta de los Montes, por vecinos de este último, aunque no está claro el porqué de su exilio. Algunas teorías indican que el éxodo pudo deberse a la búsqueda de un territorio cercano en el que estar a salvo de alguna epidemia mortal o simplemente para evitar pagar los impuestos y tributos que les correspondían en la villa anterior.

Sin embargo, no fue hasta el siglo XVI cuando la villa no comenzó a poblarse de forma estable, cuando se vivieron varios hechos históricos en el enclave. Así, uno de los más relevantes fue la proclamación de Juana la “Beltraneja” como princesa heredera del Trono de Castilla, así como sus desposorios con el Duque de Guyena, hermano de Luis XI de Francia.

Por otro lado, Pinilla de Buitrago fue fundada de forma paralela a Gargantilla del Lozoya, compartiendo una historia y costumbres similares. De esta manera, en el siglo XIX —tras independizarse del Duque del Infantado y señor de las tierras de Buitrago— ambos pueblos se unieron conformando un solo municipio.

Tres rutas de senderismo con las que conocer Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago

Ubicada en la Sierra de Guadarrama, Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago cuenta con una gran variedad de entornos naturales entre los que poder descubrir a la vez que se disfrutan de varias rutas senderistas.

Una de las mejores opciones es la ruta circular por la ribera del Embalse de Riosequillo, la Ermita de Santiago y la Cañada de la Cerrada de Garay. Se trata de un trayecto de 8 kilómetros de longitud y una duración aproximada de poco más de 3 horas en el que recorrer el gran embalse cercano al pueblo.

La ruta comienza en Pinilla de Buitrago, desde donde hay que dirigirse hacia el Arroyo de Pinilla por una pista de tierra denominada la Cañada de la Cerrada de Garay. Desde ahí, habrá que transitar por la orilla del embalse durante gran parte del recorrido, atravesando puntos como la Desembocadura del Arroyo del Chorro, la Ribera del embalse, el Zarzo del Molino, la Ermita de Santiago o la Laguna Cerrada de Gascones.

De la misma manera, una alternativa para conocer en primera persona el patrimonio cultural del municipio es la ruta por el Camino de la Ermita de Santiago. Este sencillo recorrido de menos de 3 kilómetros de longitud comienza en la Plaza Constitución en Pinilla de Buitrago y finaliza en Plaza Carlos Ruiz en Gargantilla de Lozoya, permitiendo descubrir todo lo que ambos asentamientos tienen que ofrecer.

Similar a la ruta del Embalse de Riosequillo, para comenzar el recorrido habrá que dirigirse a la Cañada de la Cerrada de Garay, desde el que habrá que continuar por un camino de tierra hasta ver los restos de la antigua Ermita de Santiago.

Desde este punto es posible comenzar a ver los tejados de Gargantilla, aunque destaca por encima de ellos el imponente Cerro de la Cruz, con una altitud de 1.514 metros. Para llegar a la otra plaza del municipio, habrá que cruzar un puente, una manga ganadera, y ya en Gargantilla la Fuente de la Bellota. Al continuar, el recorrido finalizará en la Plaza de Carlos Ruiz.

Otro de los recorridos más característicos alrededor del enclave es la subida a la Cachiporrilla por la Mata de los Ladrones. Este trayecto consta con una longitud de 14 kilómetros y una duración de 7 horas, por lo que es recomendable para aventureros algo experimentados.

Sin embargo, el esfuerzo merece la pena, ya que el itinerario finaliza en los Altos de Hontanar, uno de los mejores puntos para disfrutar de las vistas que ofrece la Comunidad de Madrid. El recorrido comienza en un pequeño aparcamiento de tierra desde el que habrá que ascender a pie por pendientes suaves y no muy empinadas.

Así, una vez disfrutadas de las vistas en el Cerro de la Llanada, habrá que volver por el mismo recorrido tras aproximadamente dos kilómetros para después continuar por otro camino, volviendo a la ruta cercana al pueblo de Gargantilla de Lozoya un recorrido circular. Si se desea realizar este recorrido, es posible informarse tanto del punto exacto de comienzo de la ruta como de todas sus paradas y puntos de interés a través de Wikiloc.

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