“El principal problema que tiene la Isla es el caciquismo y las redes clientelares”

Es licenciando en Historia, ha realizado un curso de posgrado de Especialista Universitario en Archivística y prácticas remuneradas en algunas acciones formativas, pero en la actualidad se encuentra en situación de desempleo “como muchos jóvenes”. Dailos González (San Cristóbal de La Laguna 1985) es el candidato de Podemos al Cabildo de La Palma. Su plato preferido es el revoltillo palmero y su tiempo libre lo dedica a leer, escuchar música y a actuar en una agrupación folclórica. Procede de movimientos sociales y sindicatos estudiantiles universitarios. “Comencé a asistir a movilizaciones sociales a los 16 años, y a los 17, inicié mi militancia en la organización juvenil Azarug”, recuerda. “En el movimiento estudiantil he sido militante y representante claustral en la Universidad de La Laguna con el Sindicato de Estudiantes Canario y la Asamblea del Movimiento Estudiantil Canario, y también he participado en distintas plataformas y asambleas reivindicativas y he sido miembro de Alternativa Popular Canaria (APC) y Unidad del Pueblo (UP)”, detalla. Suele leer varios libros a la vez, y ahora mismo tiene varios frentes abiertos: ‘Qué hacer’, de Lenin; ‘El final de la guerra’, del historiador Paul Preston, e Historia Contemporánea de Canarias, dirigida por Agustín Millares Cantero y Sergio Millares Cantero, entre otros. “Y la Ilíada, de Homero, dejando de lado el debate sobre si existió realmente o no Homero”, remarca.

-¿Cuál cree que es el principal problema que tiene La Palma?

-El principal problema que tiene la isla es el caciquismo, con una serie de poderes económicos fácticos y una oligarquía que teje sus redes clientelares impidiendo que pueda desarrollarse una verdadera democracia. También es evidente que el desempleo es otro de los graves problemas, pero no se trata únicamente de luchar contra él, sino de garantizar puestas de trabajo de calidad, puesto que en La Palma, al igual que en el conjunto del Estado, hemos asistido a una pérdida paulatina de derechos laborales y a una cada vez mayor precariedad en este aspectol. El trabajo digno es un derecho que nos pertenece, no un favor que nos regala el poderoso de turno.

-¿Qué compromisos adquiere con los ciudadanos?

-Las personas que nos presentamos con Podemos hemos firmado todas un código ético por el cual asumimos el compromiso de recuperar la soberanía popular y democrática, garantizar que la política deje de ser un espacio al servicio de intereses privados, promover la participación directa e igual de la ciudadanía en los ámbitos decisorios poniendo las instituciones en manos de la gente y trabajar por una sociedad más igualitaria y justa. Las instituciones deben estar al servicio de la mayoría social, no de los sectores más privilegiados. Del mismo modo, las personas de Podemos que ocupemos cargos electos renunciamos a cualquier tipo de privilegio ya sean jurídicos o materiales, comprometiéndonos a limitar nuestros salarios, que nunca pueden superar al equivalente a tres salarios mínimos, y a rendir cuentas públicas de nuestro patrimonio. Tampoco queremos depender de los bancos, no se puede defender a entidades bancarias que desahucian o hacen negocios a costa de la ciudadanía y, a la vez pretender también defender a la ciudadanía. Es imposible estar en los dos bandos a la vez, y en Podemos estamos con la ciudadanía, con las personas de abajo.

-¿Cuál será la primera medida que adoptará en caso de ser elegido presidente del Cabildo?

-Nuestra primera medida sería lanzar un plan de rescate ciudadano, en vez del rescate a la banca que se ha venido practicando hasta ahora. El deber de cualquier institución pública es garantizar el bienestar y unas condiciones de vida dignas para todas las personas, pues cada vez más ciudadanos tienen serias dificultades para poder atender a sus necesidades fundamentales. El Plan de Rescate Ciudadano es, de hecho, el primer punto de nuestro programa marco para el conjunto del Estado, que fue publicado estos días. Claro que para llevar adelante esto es necesario también que el Cabildo tenga la máxima transparencia y unos mecanismos eficaces de participación ciudadana.

-¿Qué modelo económico defiende para la Isla?

-La Palma necesita un equilibrio entre los tres sectores productivos. Sería absurdo pensar que un único megaproyecto, como los que suelen presentarse en época electoral, sea la panacea a todos nuestros problemas. Es preciso generar sinergias entre los distintos sectores: primario, secundario y terciario, atendiendo siempre a la sostenibilidad ambiental, pues el desarrollo a costa de destruir el territorio puede tener consecuencias terribles, es decir, hipotecar nuestro futuro y el de las generaciones venideras. Deben impulsarse verdaderamente una agricultura y ganadería diversificadas, que atiendan no sólo a la exportación sino también al consumo interno avanzando hacia una soberanía alimentaria. ¿Cómo es posible que en una isla como La Palma importemos la mayor parte de lo que consumimos? ¿cómo es posible que sea prácticamente imposible encontrar leche fresca, por poner un ejemplo, en una isla de tradición ganadera? Debe existir también una industria de transformación alimentaria y, frente al turismo de masas que siempre terminará generando unos beneficios que van a parar a pocas manos, debe promoverse el agroturismo, el turismo rural, turismo de naturaleza y, en definitiva, un modelo que atienda a las peculiaridades de la isla.

-¿Está dispuesto a pactar con cualquier formación para formar gobierno?

No. Salimos a ganar, a reivindicar un cambio. Desde Podemos planteamos una serie de principios básicos, no realizar negociaciones simplemente para buscar un sillón. Hay que tener en cuenta que los tres grandes partidos, PP, CC y PSOE, han tenido responsabilidades de gobierno en la última legislatura en el Cabildo.