La ciudad se hace con la gestión del 100% de los espacios de la Marina de València

València asumirá la gestión del 70% de los terrenos de la Marina de València que son de dominio público portuario, es decir, de la Autoridad Portuaria (APV), lo que facilitará la gestión de estos espacios en los que se realizan todo tipo de actividades. Algunas de las zonas incluyen concesiones, es decir, arrendamientos de espacios por parte empresas para desarrollar una determinada actividad. Hasta ahora se daban situaciones tan surrealistas como la imposición de penalizaciones de 14.000 euros por parte de la APV por permitir la libre circulación de viandantes por los terrenos portuarios de la Marina.

El diputado de Compromís en el Congreso, Joan Baldoví, junto al alcalde de València, Joan Ribó, y la síndica de las Corts Valencianes, Papi Robles, anunciaron este miércoles que la coalición valencianista ha logrado un compromiso del Ministerio de Transportes y de Puertos del Estado para que se lleve adelante la gestión de estos terrenos por parte del Ayuntamiento de forma unitaria. Este es uno de los compromisos arrancados a cambio de apoyar los presupuestos generales del Estado.

Actualmente, unos 500.000 metros cuadrados de la Marina de València los conforman la lámina de agua y otros 500.000 los diferentes espacios en superficie. De ellos, el Ayuntamiento ya es el responsable directo de un 30% de los terrenos que se desafectaron en su día, concretamente, de la parte de los tinglados, la estación marítima, las bases de la Copa del América y el edificio Veles e Vents. El resto, incluida toda la marina sur, forma parte de los terrenos de dominio público portuario, es decir, de la APV.

Esto permitirá seguir gestionando toda la Marina de forma unitaria, tal y como se hacía hasta ahora con el Consorcio Valencia 2007, órgano creado para coordinar el funcionamiento del recinto y participado por el Gobierno (40%), por la Generalitat Valenciana (40%) y por el Ayuntamiento (20%), en fase de liquidación.

Así, el Consorcio seguirá gestionando todo el espacio hasta que su liquidación sea efectiva, lo que está previsto para final de año. Después, toda la gestión pasará al Ayuntamiento de València. Para hacerlo posible, la APV renovará la cesión gratuita del 70% de la Marina que es de su propiedad, un proceso administrativo que puede prolongarse dos años.

Al mismo tiempo, el Ayuntamiento ha encargado un informe jurídico para determinar bajo qué fórmula se hará cargo del espacio. La idea es crear una nueva entidad municipal similar al Consorcio que se encargará de mantener la gestión integral de la Marina, para lo que ya ha habilitado una partida presupuestaria de 4 millones de euros. Esta entidad se subrogará a los 30 trabajadores del Consorcio. En cuanto a la gestión de los 970 amarres, de forma conjunta con la APV se sacarán a concurso público, un trámite obligado por ley. En el pliego de condiciones establecerá el uso público de los espacios y garantizará la continuidad gratuita de las actividades de la escuela de vela y de remo.

Llama la atención el inmovilismo de la Generalitat Valenciana en todo este proceso, que había manifestado su intención de crear junto al Consistorio una empresa pública o fundación para la gestión del espacio, en concreto de la lámina de agua.

Sin embargo, ante la indefinición de la administración autonómica, ha sido el Ayuntamiento que preside Joan Ribó, de Compromís, el que ha tomado la iniciativa, lo que no implica que tanto la Generalitat como la APV puedan sumarse en lo sucesivo.

Discrepancia con el Gobierno sobre la desafección de los terrenos

Baldoví aseguró en su intervención que el compromiso adquirido por el Gobierno iba más allá de ceder la gestión de los terrenos al Ayuntamiento y añadió que además se iba a iniciar el proceso de desafección del 70% de los terrenos hasta ahora de titularidad del Puerto en favor de la ciudad. Así lo recoge el documento facilitado este miércoles por Compromís a la prensa con todas las promesas del Gobierno a cambio de las cuales se comprometía el apoyo de la coalición valencianista a los presupuestos generales del Estado.

Sin embargo, horas más tarde de trascender esta información el Gobierno aseguró que en ningún momento se habló de la desafección de los terrenos, es decir, del traspaso de titularidad del Puerto a la ciudad, sino de que “la puesta en valor de los terrenos y de la lámina de agua del puerto de Valencia adscrita a la citada Marina se realizará por parte de la Autoridad Portuaria de Valencia de forma consensuada tanto con el Ayuntamiento como con la Generalitat, asegurando en todo momento que los usos que se desarrollen estén plenamente orientados al disfrute del ciudadano, tal y como ocurre en numerosos procesos de integración puerto-ciudad llevados a cabo en el litoral español”.