El Gobierno central trata de consensuar con el vasco la historia que se cuenta de ETA en los institutos
La memoria reciente de Euskadi, el periodo que va desde 1960 hasta 2018 y que ha estado marcado por el terrorismo de ETA, será estudiado este curso de manera experimental por los alumnos de cuarto curso de la ESO y segundo de Bachillerato de algunos centros educativos. Al menos, eso es lo que pretende el Gobierno vasco, que ha presentado los materiales didácticos del programa educativo 'Herenegun!' sobre la memoria reciente de Euskadi para la asignatura de Historia. Estos materiales están destinados a trabajarse a través de una experiencia piloto en ocho centros vascos durante el último trimestre del curso. Hasta ahí la declaración de intenciones, pero la lluvia de críticas de los partidos políticos no nacionalistas y las asociaciones de víctimas que entienden que el programa del Gobierno vasco no deslegitima el terrorismo con firmeza y que alimenta la “teoría del conflicto” amenaza con dejar para otro momento la implantación de estos materiales.
será estudiado este curso de manera experimentalla lluvia de críticas
Ante el aluvión de críticas, el Gobierno vasco se apresuró a precisar que el programa se encuentra abierto a todo tipo de aportaciones. Y a eso se ha aferrado el Gobierno central, que ha suspendido la rueda de prensa que tenía previsto ofrecer para cuestionar directamente el programa. De momento, la delegación del Gobierno en el País Vasco enviará por escrito sus aportaciones con el objetivo de “buscar el máximo consenso, elemento clave en esta cuestión”. En esa rueda de prensa iban a tomar parte el delegado del Gobierno en Euskadi, Jesús Loza; la directora general de Apoyo a Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior, Sonia Ramos, y el director del Memorial Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez. Es decir, una rueda de prensa al más alto nivel.
Los materiales didácticos del programa educativo 'Herenegun' sobre la historia reciente de Euskadi, que abarca el periodo 1960-2018, está compuesto por textos y vídeos que recogen testimonios de víctimas de ETA, así como de exmiembros de la banda y representantes políticos.
Covite y la AVT han sido las más duras con el programa del Gobierno vasco. Ambas asociaciones de víctimas de ETA entienden que el módulo educativo “manipula” la historia al omitir el “significado político de las víctimas”. “Se cuenta la historia de tal manera que implícitamente es fácil extraer que hubo dos bandos y víctimas de ambos lados”, consideran. Uno de los puntos que más critican es que las fuerzas de seguridad no salgan “bien paradas” como víctimas mientras se contextualiza la actividad de ETA con la existencia de “represión policial”.