Urtaran (PNV) gana en Vitoria con la fuerte irrupción de la socialista Maider Etxebarria
La batalla de Vitoria ha contado con una invitada inesperada. Una sorpresa que nadie esperaba y las encuestas no pronosticaban. Arrastrada por la victoria de Pedro Sánchez en la capital vasca hace solamente un mes, en las elecciones generales, la nueva y semidesconocida candidata del PSE-EE, Maider Etxebarria, directora de Turismo del Gobierno vasco, ha irrumpido con fuerza y ha mejorado en 11.000 votos los números de 2015.
Se ha quedado cerca de la victoria y sólo por detrás del actual alcalde, Gorka Urtaran (PNV), quien también ha experimentado una fuerte subida (9.000 papeletas) dentro de una solidez general de su partido. Urtaran, en su comparecencia ante los medios de comunicación tras conocer los datos definitivos, se ha emocionado y ha prometido volver mañana al Ayuntamiento para retomar el “día a día” para mejorar la ciudad.
No obstante, desde el punto de vista estadístico, esta de Urtaran pasará a la historia como la victoria de unas elecciones en Vitoria con menos representación, lo que prueba la fragmentación del panorama político local. El hito anterior lo había marcado José Ángel Cuerda, también nacionalista, que logró 8 concejales en 1991 con la fulgurante aparición de Unidad Alavesa con 7 representantes. En Vitoria, por cierto, ha ganado el PNV, en abril lo hicieron los socialistas, hace cuatro años el PP y en las europeas de 2014 EH Bildu.
El actual Gobierno de coalición de PNV y PSE-EE, en una posición de clara minoría con 9 (5+4) de 27 concejales, apuntala su posición, por lo tanto, al pasar a disponer de 13 ediles (7+6). No obstante, esa suma todavía no sería suficiente para alcanzar la mayoría absoluta, pero en el horizonte no se atisba otra alternativa política que sí pueda lograr esos votos. Finalmente, la cabeza de lista de EH Bildu, Miren Larrion, ha quedado en tercera posición, con números similares (incluso ligeramente superiores) a los de 2015 pero algo lejos de las expectativas generadas. Ella aspiraba a ganar y ser la primera fuerza en la izquierda, pero
La otra cara de la moneda es la debacle del PP. Un fiasco sin paliativos a pesar del giro al centro tras la debacle de las generales en abril. Tras unos resultados históricos en 2015 con Javier Maroto, Leticia Comerón ha perdido 13.000 votos (11 puntos, del 29% al 18%). Pasa de nueve a cinco concejales, un dato que no se veía desde 1995 y cuando la competencia del voto foralista con la extinta Unidad Alavesa era feroz. Esos cuatro escaños que se deja el PP se los reparten los partidos que han gobernando en coalición la ciudad, dos para el PNV y dos para los socialistas.
Elkarrekin Podemos cierra la lista con tres ediles, los mismos que tuvieron hace cuatro años Podemos e Irabazi (IU-Equo) por separado. Fuentes de la coalición admiten que los datos no son positivos, sobre todo teniendo en cuenta que hace cuatro años el proyecto era nuevo y desconocido. Ciudadanos, finalmente, ha quedado lejos de lograr un acta de concejal, incluso por debajo del 3% de 2015. Vox ni siquiera alcanza el 1,5%.
